[Documental dirigido por Chema Salcedo].


En su faceta de cineasta Chema Salcedo comenzó como guionista y actor, para introducirse luego en la realización cinematográfica y ha dirigido ya tres largometrajes. El último es “Aita”, dedicado a su padre y a toda una generación de vascos que luchó en la Guerra Civil y tuvo que marchar al exilio durante la larga etapa de la dictadura franquista, para morir muchos de ellos lejos de Euskadi. De modo que, Chema salió de Bilbao camino de Perú con su familia a los cinco años, en 1951, y vuelve ahora en 2014 a su país natal de la mano de la Dirección del Gobierno Vasco para la Comunidad Vasca en el Exterior, para reconstruir la imagen de su padre con el transfondo de dos mundos (Euskadi y América Latina) y una época de nuestra historia.


Chema Salcedo (Bilbao, 1946) llega a Euskadi desde Perú siguiendo las huellas de su padre, gudari vasco fallecido en 2012, a quien describe en su último film documental: “Aita”.


Chema Salcedo lo ha sido todo en el mundo de la comunicación en Perú: redactor, reportero, corresponsal en el extranjero, columnista, editor, profesor universitario, ensayista y director de periódico. Ha trabajado asimismo en radio, televisión y cine. Medios a los que dedica en la actualidad la mayor parte de su tiempo.

TEXTO
La afluencia de público y la viveza del debate posterior a la proyección han caracterizado los pases anteriores de Bilbao, Vitoria-Gasteiz y Donostia / San Sebastián, y también el de Lima, una semana después de los anteriores, con la sala repleta de espectadores. Ahora la película llega a Santurtzi, en un pase especial.

El film “Aita” se proyectará en el Palacio Oriol de Santurtzi el 12 de diciembre a las 19:30 horas. El director de la película, Chema Salcedo (Bilbao, 1946), llegó el pasado mes de junio a Euskadi desde Perú siguiendo las huellas de su padre, gudari vasco fallecido en 2012, a quien describe en “Aita”, su más reciente film documental.

Esta película se proyectó asimismo el lunes 16 de junio en el Museo Vasco de Bilbao, el 17 en el Museo Artium de Vitoria-Gasteiz y el 18 en el Salón Kutxa de la Calle Arrasate de Donostia / San Sebastián. El 24 de junio se estrenaba en Lima, con la sala repleta de espectadores. En setiembre pasado se exhibió en Iquitos, en la sala de Gobernadores del Museo Amazónico, con la presencia del propio Chema Salcedo.

Ahora, el 12 de diciembre, la película llega al Palacio Oriol de Santurtzi, en un pase especial. Asistirán los dos únicos gudaris que al día de hoy siguen vivos: José Moreno, 96 años, residente en Portugalete y Manuel Sagastibeltza, 97 años, residente en Santurtzi. En la proyección en el Palacio Oriol estará también, en representación de Chema Salcedo, su amigo y a su vez presidente de Emprebask Perú, Aitor Bilbao Izagirre, así como Asier Vallejo Itsaso, director del Gobierno Vasco para la Comunidad Vasca en el Exterior, que presentará y conducirá el debate posterior a la exhibición de la película.

En 1936 estalla la Guerra Civil española y el padre de Chema, plenamente identificado con la democracia parlamentaria y el nacionalismo vasco, combate como artillero en un batallón de gudaris. La República es derrotada militarmente por las fuerzas sublevadas del general Franco y tras diversas vicisitudes la familia Salcedo marcha al exilio. Chema tenía 5 años cuando abandona su Bilbao natal hacia el Perú.

En una secuencia de la película el escritor Kirmen Uribe le recuerda a Chema Salcedo que su padre y los otros gudaris fueron civiles que se convirtieron en soldados para pelear por la libertad, que perdieron la guerra militar frente a las experimentadas divisiones del general Franco, pero que no pierden la guerra de la memoria, ni la de la legitimidad, ni la de la ética. El film es un homenaje a su padre (gudari vasco) y a toda una generación de vascos, que lucharon en la Guerra Civil y  tuvieron que marchar al exilio durante el largo periodo de la dictadura franquista, para morir muchos de ellos lejos de Euskadi.

Formado en Perú, famoso periodista en ese país y con el referente de su origen vasco presente, Chema Salcedo retorna en varias ocasiones a Euskadi para mantener el contacto con sus familiares y, finalmente, en 2013 lo hace para comenzar a filmar la película documental sobre su padre, tras la muerte de éste en 2012.