¿El mal consentido?
El título de esta crónica es el título de un magnífico libro de Aurelio Arteta, el profesor vasco escruta la conducta del espectador y cuestiona al fisgón pasivo, el saber y callar no nos exime de culpa, a propósito ¿acarrea responsabilidad? El libro de Arteta cuestiona cualquier tipo de pasotismo cívico. Pero entrando en arenas ¿Qué pasa cuando estamos ante la presencia de un hecho corrupto y hacemos caso omiso? ¿Estamos permitiendo el mal? ¿Esta conducta se agrava si somos periodistas y ante el mal miramos para otro lado? ¿Acaso el callar o silenciar un hecho corrupto puede ser una conducta cómplice? Este rollo de preguntas es a raíz de una noticia publicada en un medio de comunicación de ámbito nacional sobre el presunto hecho corrupto en el Gobierno Regional de Loreto y que, de acuerdo, a la noticia podría acarrear serias responsabilidades administrativas y penales. Es un lío gordo y que necesita aclararse, así se combatiría la opacidad del manejo de las cuentas públicas. La periodista Claudia Cisneros en su columna de opinión “La estafa del siglo en Loreto” ha hurgado estos miasmas en la sede del gobierno regional pero, desgraciadamente, de lo que puedo leer en los diarios locales no hay noticia o respuesta alguna de los aludidos [se menciona un forado de 78 millones de soles, que no es moco de pavo, es un monto que nunca llegó a los beneficiarios], ¿se piensa pasar página y no contestar? Es más, el diario Pro y Contra no publica nada respecto a ella y me extraña mucho porqué se ha distinguido por poner el acento ante estos presuntos delitos y más si afectan a la Hacienda Pública. ¿No cree el diario que sería justo y necesario siquiera aludir a ese hecho y publicar una noticia al respecto? Si la publican ganarían los lectores, la vida pública y, como no, la región que necesita ventilar estos hedores.
http://www.larepublica.pe/columnistas/de-centro-radical/la-estafa-del-siglo-en-loreto-08-03-2013