Pase,  maestro

ESCRIBE: José Rodriguez Siguas

El segundo documental de la Marca Perú, que versa sobre Loreto, ha generado opiniones diversas, lo cual es entendible en la medida que ha podido mostrar desde distintas aristas, la visión del espacio amazónico. La publicación de este documental me da motivo para hablar sobre un aspecto de nuestra cultura (no de la gastronomía, que por cierto ya parece sobrecargado, no olvidemos que el mismísimo Ferran Adrià estuvo por la Amazonía en busca de especias nativas).

Pues bien, la pintura en los últimos años ha tenido una eclosión que devino en la muestra de la pintura de Rember Yahuarcani (con varias exposiciones en el extranjero), pintor huitoto heredero de la tradición del gran Víctor Churay. Uno de los catalizadores de esta movida es Christian Bendayán en su faceta no sólo de pintor, sino también de curador y sobre todo de promotor. Pero hay un nombre que siempre pasa desapercibido, dado que no está metido en “aquelarres” ni lobbys artísticos, sino que se dedica de manera seria a su trabajo;  me refiero a Gino Ceccarelli.

Gino Ceccarelli estudió en la Escuela Regional de Bellas Artes de Iquitos, en la Escuela Nacional de Bellas Artes de Lima, así como en talleres de Washington D.C. y en París. Fue director del INC de la Región Loreto. En la actualidad,  preside el Patronato que busca la creación de un Museo Amazónico que tanta falta hace. Ha establecido su residencia, por ahora, en Lima.

Dentro de su larga producción artística quiero resaltar sus óleos sobre tela: “La tierra sin mal”, “Mamaluna”, “Madreselva”, “La luna verde” que desprenden una belleza sin igual, y sobre todo ese gran cariño que Gino siente por la Amazonía. Los trazos que despliega  son hechos no solo con técnica magistral, sino también con amor y ternura, con delicadeza subliminal; un canto, una tonada a nuestra herencia cultural, un icaro shamánico diría, así trabaja Gino.

Pero nuestro más grande pintor amazónico no es de aquellos que se refugia en su taller y deja que las cosas pasen, cuando ha tenido que decir las cosas claras lo ha hecho, cuando ha tenido que encabezar pronunciamientos y otras actividades de protesta ha estado siempre en primera fila, lo que demuestra su compromiso como intelectual y artista. Es decir, es un hombre de su tiempo, que no se corre a las responsabilidades.

Estas líneas son un sentido homenaje a Gino Ceccarelli, si bien la pintura nunca me ha llamado la atención, fue gracias a los cuadros de Gino, que comencé a ver de manera distinta la pintura y a apreciarla.

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