Embarazo adolescente: cuestión seria

Escribe: José Rodríguez Siguas

Por estos días en varios medios se dio a conocer que Loreto está otra vez en el pico más alto de las estadísticas, pero no crean que es por algo positivo, todo lo contrario: el embarazo en adolescentes es hoy una de las muestras estadísticas más tristes, por lo mismo, se debería hacer algo.

El grupo etario de embarazo en menores fluctúa entre los 12 y 16 años (para la obstetra Nidia Rojas la incidencia de embarazos “es a partir [sic] de los 14 y 15 años que también constituye un alto riesgo”), un caso reciente, y totalmente espeluznante, es el que apareció en una nota en este diario el jueves último, en donde una menor de 12 años dio a luz una niña, el padre tiene tan solo 14 años, lo que llama la atención en dicha nota es que los padres se dieron cuenta recién a los ocho meses y medio que la pequeña estaba esperando un bebé, ¿acaso una madre no es la persona más adecuada para darse cuenta de ciertas cosas que pasa con sus hijas? ¿Acaso no son minuciosas de cómo va la regla, de cuando faltan las toallas higiénicas y otras cosas que toda madre debería saber? Aquí hay una tarea pendiente de parte de los padres de familia (y más aún de las madres), falta de comunicación que le llaman.

Jaime Marín, médico del Hospital Regional que atendió a la menor en la cesárea, da cuenta en el reportaje antes citado que “El porcentaje es más de un 30 por ciento de madres adolescentes [que llegan a atenderse] comparado con otras regiones […] en otras regiones es el 10 a 15 por ciento […] en algo estamos fallando en el sector Salud, no estamos trabajando bien o no estamos trabajando en conjunto con Educación”. Las palabras del doctor Marín dan luces de cómo se debe enfrentar este problema, y no hay que esperar que la Dirección Regional de Salud resuelva el problema, lo cual es imposible, es pues tarea de distintas instituciones combatir esta forma de degradación social, por lo tanto, debe involucrar a otras direcciones regionales como Educación, Cultura, de la Mujer, entre otras; además, los medios de comunicación juegan un papel preponderante, pues la difusión de temas como éste propicia el debate y las posibles soluciones al problema.

Finalmente, son los padres quienes tienen la mayor responsabilidad, por lo que deberían tener un mayor grado de comunicación con sus hijos; los padres no están solos, para eso están los maestros, los mejores aliados en esta lid. Padres y maestros tienen una tarea difícil, pero no imposible, revertir las estadísticas en cuánto al embarazo en adolescentes; siempre y cuando exista el apoyo oportuno de las autoridades.

1 COMENTARIO

  1. los llamados a dar conocer los diferentes métodos anticonceptivos son los miembros del Ministerio de Salud, pero veo con mucha preocupación que no es hací, nada o muy poco se hace al respecto, el gran problema de la Región Loreto es la pobresa, ésta, acompañada de los embarazos en menores de edad que precisamente no vienen con un pan bajo el brazo como dice un viejo conocido adagio, sino por el contrario trae a la nueva generación de pobres.
    El gobierno Regional mediante su gerencia de desarrollo social debe llevar a cabo programas agresivos sobre la difusión de los métodos anticonceptivos, en los menores provenientes de escasos recursos, digo esto por que vemos que la mayoria de estos casos se vee en niñas de familias pobres, es preocupante ver a familias con escasos recursos con hijos que van de seis para arriba mientras mas pobres son, más hijos tienen, entonces, la difusión de programas de anticonceptivos debe abarcar no solo a adolescentes sino a los padres, en el caso de las parejas ya mayores hacerles saber que se cuentan con programas gratuitos como la ligadura de trompas y la vasectomia; finalmente traer al mundo (hablemos solo de Loreto) traer a Loreto a un niño o niña sin tener los medios minimos para su manteción y evitar que años mas tarde sea explotado por gente sin escrúpulos, deberia ser penado… espero que halgo se haga por que hay mucho por hacer.

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