Estar en una relación sentimental puede ser una cosa maravillosa, pero también puede ocasionar varios problemas si no es tratada de la forma adecuada. Malentendidos, mala comunicación o simplemente conflictos triviales pueden lastimar severamente tus sentimientos y los de tu pareja.
Ábrete a la comunicación: Abrir tu comunicación con tu pareja puede ser una gran solución para los problemas, la mejor forma de hacerlo es haciendo preguntas: ¿cómo te ves en 5 años?, ¿perros o gatos?, ¿cuántos hijos quieres? La próxima vez que estén en el coche, traten de jugar el juego de preguntas, seguro descubrirán cosas nuevas que no sabían el uno del otro.
Dale tu atención: Pon atención a tu pareja. Cuando estés con el apaga el celular, olvida los problemas del trabajo y sólo concéntrate en él, no significa que sea lo más importante de tu vida, pero si dale el lugar que merece. La próxima vez que veas a tu novio, haz exactamente eso y elimina todas las demás distracciones. Escucha, observa, checa sus emociones y reacciona.
Checa tu agenda personal: Si un día tu pareja llega diciendo que tuvo un mal día en el trabajo, no respondas diciendo que tú también, es como si dijeras, “ya sé que te fue mal, pero a mí me fue peor”. Sin querer hacerlo, te robas su historia y toda la atención se fija en ti. Es difícil, pero deja que tu pareja se desahogue sin meter tus problemas, después vendrá el momento para que tú le cuentes las dificultades que atraviesas.
Estos consejos junto con un esfuerzo de las dos partes, te ayudarán a que tengas una relación sana y duradera.