En ocasiones postergamos los chequeos médicos, porque en el momento no sentimos ningún malestar, pero cuando de salud se trata no hay ningún pretexto para tomar las medidas necesarias y prevenir alguna enfermedad. Por eso es importante que conozcas 5 chequeos médicos que toda mujer debe realizarse.
- Seno
La Sociedad Americana Contra el Cáncer ha mencionado que un chequeo de estos se centra en conocer bien tus senos para que notes cuándo hay cualquier cambio físico o sensación extraña. Lo ideal es que acudas al ginecólogo para que te haga un chequeo más completo.
- Papanicolau
La AECC Contra el Cáncer, explica que este se realiza ante la sospecha de anomalías en el cuello uterino por infección porVirus del Papiloma Humano (VPH) o presencia de ulceras en el cuello de la matriz. Los ginecólogos recomiendan hacerte este examen en cuanto comiences a tener una vida sexual activa o a partir de los 21 años. Después de tu primer examen, el estudio se realiza cada tres años hasta que cumplas los 35 años y después cada 5 años.
- Glucometría
Se trata de un chequeo sencillo que sirve para medir los niveles de glucosa en sangre. Se recomienda a mujeres que sean propensas a padecer Diabetes Mellitus o que ya hayan sido diagnosticadas. El procedimiento se realiza con un glucómetro, que es un aparato que toma una pequeñísima muestra de sangre para medir tu azúcar.
- ETS
Una prueba de ETS detecta cualquier enfermedad de transmisión sexual. Estas pruebas son fáciles de hacer y lo que recomiendan los médicos es realizarte la prueba una vez al año, pero si has tenido relaciones sexuales sin la protección adecuada y sospechas que algo no está bien, debes hacerte una cuanto antes.
- Colesterol y presión arterial
Esta es una prueba que no podemos pasar por alto, ya que tanto la presión como el colesterol, pueden alterarse sin que nos demos cuenta. El estrés diario y una mala alimentación, son los responsables de que nuestro cuerpo sufra estos cambios inadvertidos. Es importante hacerse un chequeo regular, especialmente a partir de los 30 años para evitar eventos cardiovasculares.