Aunque a veces no nos demos cuenta nuestros pensamientos tienen un gran influencia sobre nuestro cuerpo. Nuestra mente y cuerpo tienen una conexión muy especial y todos nuestros pensamientos se ven reflejados en nuestro organismo, ya sean positivos o negativos. En ocasiones estamos buscando bajar de peso y simplemente no lo conseguimos, atribuyendo esto a que tal vez no estamos siguiendo la dieta que nos recetó el nutriólogo de forma adecuada o no estamos haciendo la cantidad de ejercicio necesaria.
Sin embargo, pocas veces nos damos cuenta de que lo pensamos puede estar influyendo para que no logremos nuestro objetivo. Reflexiónalo ¿qué es lo piensas o lo que te dices cuando te ves al espejo? o ¿qué pensamientos pasan por tu cabeza cuando te colocas sobre la báscula?
A continuación te decimos tres pensamientos negativos que no te permiten bajar de peso:
- «No tengo fuerza de voluntad» o «No voy a poder»
Este es uno de los pensamientos que más te van a limitar en la vida, y no sólo para perder peso, sino para cualquier lograr cualquier meta que te propongas. Si aún no has comenzado la carrera y ya te diste por vencida, seguramente perderás la batalla. Todos tenemos fuerza de voluntad y podemos lograr lo que queramos, sólo necesitas confiar en ti.
- «Estoy muy gorda»
¿Has escuchado hablar de la «Ley de atracción»? Esta afirma que nuestros pensamientos influyen sobre nuestras vidas, argumentando que los pensamientos son unidades energéticas que nos devolverán una onda similar. Si tú te percibes como una persona «gorda» seguramente lo estarás y tu cuerpo asumirá que ése es el único estado en el que puedes estar. Lo mejor que puedes hacer es cambiar esos pensamientos, que no te aportan nada, por pensamientos que te motiven para lograr lo que quieres. Si quieres perder peso, confía en que lo harás, y ¡manos a la obra!
- «Hoy me salté la dieta, mejor ya no la sigo»
Soltar la toalla a mitad del camino, tampoco es la opción, nunca debes dejar tus objetivos a medias, ni darte por vencida antes de tiempo. No importa cuántas veces caigas o falles en el intento, vuelve a iniciar de cero, hasta que lo logres. De eso se trata la vida, de caer y levantarte, una y otra vez, no de abandonar nuestras metas.