Los efectos de no dormir bien y no tener un sueño reparador durante la noche son bien conocidos. Dormir al menos ocho horas al día es esencial para el buen funcionamiento de nuestra salud física, emocional y mental, y más allá de sentirnos cansados durante el día, las consecuencias de no tener un sueño reparador pueden ser mucho más graves. De acuerdo con el Departamento de Salud de los Estados Unidos, la deficiencia en el sueño puede incrementar el riesgo de padecer enfermedades crónicas. Además, puede perjudicar nuestro pensamiento, reacciones, trabajo, aprendizaje, así como la relación con los demás.
Es por eso que es importante encontrar estrategias que nos ayuden a conciliar mejor el sueño y a tener un mejor descanso. A continuación te presentamos 3 hábitos que debes modificar para dormir mejor:
- No desayunar
El desayuno es la comida más importante del día y omitirla puede afectar todo nuestro día. Cuando no desayunas tu calendario de comidas se desorganiza y probablemente termines ingiriendo el alimento que no comiste durante la mañana en la noche, consumiendo alimentos pesados y difíciles de digerir al final del día, lo que puede ocasionar que no logres conciliar tu sueño.
- Ansiedad
Para nadie es un secreto que las preocupaciones y el estrés pueden tener una grave influencia sobre nuestro sueño, provocando trastornos como el insomnio. Por ello, es importante que busques alternativas para relajarte, que disminuyan tus niveles de estrés y ansiedad. Algunas opciones pueden ser el yoga, la meditación, un masaje antes de dormir y evitar los productos que contengan cafeína.
- Uso excesivo de aparatos electrónicos
Si eres de las personas que por cuestiones laborales no puedes despegarte de tu teléfono móvil ni cinco minutos, intenta dejar de utilizarlo al menos algunas horas durante el día, o al menos soltarlo una hora antes de ir a la cama y por supuesto bajo ninguna circunstancia duermas con él, ya que los aparatos electrónicos pueden afectar gravemente nuestro sueño.