Escribe: Jorge Martín Carrillo Rojas
A poco más de 72 horas de volver a asistir a las urnas para elegir a quien será el próximo presidente o presidenta del Perú, y luego de haberlos escuchado en los dos debates presidenciales y haber cubierto, como periodista, la campaña de Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski, no me queda más que esperar a ver qué pasará en nuestro sufrido país desde el 28 de julio de este año.
Gane quien gane, creo que lo único que nos queda como ciudadanos comunes y silvestres es ser mucho más vigilantes porque se cumpla las andanadas de ofrecimientos de ambos candidatos presidenciales.
Yo solo espero que quien salga elegido cumpla con absolutamente todo, aunque valgan verdades, muchos dirán que espero mucho y es mejor no esperar nada.
Sin embargo, en verdad espero que en los próximos cinco años disminuya la delincuencia, que las noticias ya no sean de asaltos, robo de celulares, de muerte de inocentes, ni nada de ello.
Espero no tener que leer o denunciar algún acto de corrupción en el próximo quinquenio de gobierno. Ambos han ofrecido lucha frontal contra la corrupción y por ende se espera que durante el gobierno de quien gane, ningún ápice de corrupción se presente.
Espero que todos lleguemos a gozar de los servicios básicos. Que en Iquitos, por ejemplo, ya podamos bañarnos en ducha, olvidarnos del pate y que el agua, la tengamos las 24 horas y que llegue hasta el quinto piso, como lo anunció en su momento un ex alcalde provincial, hoy próximo congresista.
Que tengamos una Amazonía sostenible, como lo ha ofrecido una electa parlamentaria, quien por cierto estoy seguro se mostrará con total apertura ante los medios de comunicación y no seleccionará periodistas afines a ella para declarar, no creo que esto último pase.
En realidad espero, una excelente labor concertada para el beneficio de la Amazonía de los cuatro nuevos parlamentarios. Ya los estoy viendo juntos, coordinando y promoviendo medidas legislativas en beneficio de los loretanos.
Espero ver a PPK o Keiko, sea quien sea el nuevo gobernante del país, visitando la Amazonía. Luchando contra la tala ilegal y la contaminación ambiental. Coordinando con las autoridades.
Veo un país en el que todo, absolutamente todo, mejorará.
Estoy casi seguro de que los periodistas ya no tendremos nada de qué cuestionar al futuro gobierno, sea cual fuere, porque serán prácticamente perfectos. Será el gobierno cero: cero corrupciones, cero índice delincuencial, cero problemas de atención a los servicios básicos, cero coimas, cero todo.
Como para decir que viviremos en el país de Alicia: el de las maravillas.
Solo espero que esta vez no nos equivoquemos, porque si no volveremos a una suerte de queja masiva y ya estamos bastante grandecitos para saber qué es bueno y qué es malo.
Finalmente, yo espero que quien gane, no nos siga mintiendo y que por decencia cumpla con sus ofrecimientos. Por suerte ahora todo se graba y será ese registro visual y auditivo el que le enrostremos cuando no cumplan sus ofrecimientos.
Claro está que parte de lo escrito en esta columna es una suerte de locura, casi mental, sin que necesariamente puedan decir que estoy loco. Porque ya vivir en el Perú es una suerte de locura.
LLAMADA Que tengamos una Amazonía sostenible, como lo ha ofrecido una electa parlamentaria, quien por cierto estoy seguro se mostrará con total apertura ante los medios de comunicación y no seleccionará periodistas afines a ella para declarar, no creo que esto último pase.
@reporteropro