Ellas merecen respeto, consideración y admiración de nuestra parte. Ellas son la otra columna para que la sociedad se mantenga firme, incluso muchas veces se han puesto sobre el hombro todo el peso de la familia. Ellas se han ganado el derecho a tener las mismas oportunidades que los hombres. Y no debe ser vista como una competencia sino como el propósito de sacar unidos adelante al mundo. Por sus hijos, por aquellos que llevaron en el vientre durante 9 meses.