Tierra Nueva:
En la Feria del Libro Amazónico editora Tierra Nueva tuvo una presencia importante. Durante todos los días, de lunes a viernes, hubo presentaciones culturales como una evidencia de la variedad de intereses artísticos de dicha editora. La jornada tierranuevista comenzó el lunes con la presentación del poemario de Gerald Rodríguez Noriega; El libro del otro reino. La obra es un libro ambicioso como que recorre algunos periodos de la historia regional, basado en la mirada sagrada de los chamanes. En el mismo hay un tenso conflicto entre los advenedizos y forasteros y los oriundos. Los males que se suceden quedan abolidos por la presencia de la parcela utópica conocida como Tierra sin Mal. La obra fue presentada por el poeta y académico Marco Martos, el mismo que se refirió en términos elogiosos al poemario dando a entender que era un libro importante para la Cultura Amazónica. El autor luego se refirió a su vocación literaria donde tuvo algo que ver los poemas de Marco Martos que leyó en la biblioteca del colegio donde estudió.
El martes fue presentada la tercera edición del libro El linaje de los orígenes, la historia desconocida de los Iquito, de Percy Vílchez Vela. El libro es la reconstrucción de la presencia de un linaje antiguo que pobló primero la isla que después devino en la ciudad de Iquitos. El progreso de dicha urbe fue al final catastrófico para esos indígenas pues tuvieron que dejar el territorio para volver al río Nanay. La historia de esos oriundos es entonces una historia de destierro. Destierro que dura hasta el presente. El libro fue presentado por el periodista Felipe Sánchez quien demostró que el libro es un acierto al narrar las vivencias de los primeros padres de la ciudad. Luego el autor citó la casa de los iquito del presente demostrando que ellos y ellas están vivos. También lamentó la falta de atención de las autoridades quienes han abandonado a su suerte a los indígenas que viven en San Antonio de Pintuyacu.
El miércoles Jorge Coaguila presentó dos libros importantes. El primer de ellos se refiere a la obra de Mario Vargas Llosa y se titula Vargas Llosa: la mentira verdadera donde el autor menciona el contenido de las obras del insigne novelista, incluyendo aquellas obras que se refieren a la Amazonía del Perú. La segunda obra fue Julio Ramón Ribeyro: la palabra inmortal, donde el autor hace referencia a las diferentes obras del consumado cuentista, incluyendo el único cuento que habla sobre la Amazonía y que se llama Fénix. Estuvieron como presentadores Percy Vílchez y Gerald Rodríguez, los mismos que se refirieron a la admiración y la deuda que tienen con ambos escritores. A su turno Jorge Coaguila describió los capítulos de ambos libros, destacando la colaboración que tuvo de parte de los autores solicitados.
El jueves comenzó muy temprano en el Colegio Nacional de Iquitos. Hasta el auditorio del glorioso llegó la adolescente Andrea Todde, quien ya lleva publicados varios libros y compartió la experiencia de leer y escribir con los alumnos de este colegio, quienes no solamente la recibieron con aplausos sino que intercambiaron palabras con la autora. Al mediodía Andrea llegó al Colegio Sagrado Corazón donde las alumnas la esperaban en el auditorio para escucharla con atención. En este colegio tuvo dos presentaciones y en ambas se notó la participación de las alumnas, quienes solicitaban autógrafos y llevaron a sus casas los libros de la escritora. El contacto con la juventud, la participación de los escolares, la colaboración de los docentes es en verdad contagiante y motiva a seguir en este tipo de actividades.
El mismo día se desarrolló un conversatorio sobre Mario Vargas Llosa y sus relaciones con la política, el periodismo y la Amazonía. Los panelistas fueron Jorge Coaguila, José Rodríguez Siguas y Gerald Rodríguez. A su turno cada uno de los expositores habló sobre la cambiante actividad política del autor de Conversación en la catedral que migró del socialismo al liberalismo. Luego destacaron su vocación periodística que le permite tener varios tomos de artículos que escribe invariablemente quincenalmente los domingos. Luego los expositores hablaron sobre las relaciones entre la fronda y el autor de El hablador, destacando las obras que hablan de la maraña como Pantaleón y las visitadoras, La casa verde y otros.
Ese mismo jueves ocurrió un homenaje al pintor Gino Ceccarelli. Los encargados de hablar sobre la experiencia plástica del citado y sus aportes a la pintura amazónica fueron el cronista Eloy Jáuregui y Percy Vílchez. Ambos tuvieron palabras de elogio a la creatividad del homenajeado, destacaron su capacidad de plasmar en el lienzo a seres del imaginario boscoso, de pintar dioses y diosas de la fronda y su relación con los humanos. A su turno el pintor mostró un video donde se ve pintando un cuadro y luego mostró un video con algunas de sus obras expuestas en diferentes partes del mundo. El viernes en la mañana Gino Ceccarelli, en el boulevard, dibujo sobre una cartulina el viaje de una canoa con un proero y sirenas que iban de paso. Fue estimulante y emocionante para el público ver cómo trabajaba el pintor al aire libre.
El día viernes, como un final de fiesta, fue presentado el libro Con todo, contra todos, del crítico y escritor José Carlos Yrigoyen. El libro es una alabanza a la pasión colectiva del fútbol. Es una historia, minuciosa, detallista, de la selección peruana desde 1968 hasta el 2018. En el libro se incluyen las derrotas, los fracasos, los chascos y los escasos triunfos de un equipo como un documental bien informado y bien escrito. El encargado de la presentación fue el docente y escritor José Rodríguez Siguas quien dijo que el libro era un manual insuperable de la escuadra de todos los peruanos. Luego se refirió a algunas anécdotas presentes en el libro como el de Pablo León, el popular “Perico”.
En todas las presentaciones hubo algo importante que es necesario destacar. Las intervenciones del público tanto en forma de aportes como de preguntas. Lo cual quiere decir en buen castellano que este tipo de eventos tienen sus partidarios y seguidores. De todas maneras. Ante ello es importante decir que la Feria del Libro Amazónico no debe quedar ahí, sino que debe trascender en el tiempo.