Algo inusual viene sucediendo en la avenida San Antonio con calle Rosa Merino, donde se construyen veredas sin considerar el acceso para las personas con discapacidad.

Pro y Contra llegó hasta esta zona y evidenció que los trabajos nada inclusivos. En una parte se aprecia una pequeña rampa que une las bermas, pero el diseño de las mismas carece de criterio, porque están a desnivel.

Al ser consultado uno de los obreros, indicó que fueron los propios vecinos quienes solicitaron que no se consideren las rampas. ¿Dónde queda la inclusión social?