*Sostienen que los vendedores devolvieron la tranquilidad a la zona donde habitaban gente de mal vivir.
Vecinos de la cuadra 10 de la Calle Ricardo Palma aseguraron que el desalojo de los comerciantes se dio con abuso de autoridad.
«Ellos protestan porque les han botado sus puestos, sus mesas y sus productos. Es entendible, me pongo en el lugar de ellos porque viven del día a día», comentó una moradora.
La pobladora denunció que este sitio en horas de la noche se convierte en “zona de nadie” y es tomada por personas del mal vivir y barras bravas que vienen con machetes. Fue gracias a los comerciantes y a su vigilancia que se devolvió la tranquilidad.
Otra vecina criticó a funcionarios de la Municipalidad por haber actuado de esta manera y desconocer el acuerdo que tenían con los vendedores.