La cruzada de solidaridad emprendida por segunda vez por el Vicariato Apostólico de Iquitos de por fin da buenos frutos. La iglesia logró adquirir una planta de oxígeno que ayudará a aliviar la sobredemanda y colapso que enfrentan los centros de salud por el desabastecimiento de este elemento vital.
El padre Raymundo Portelli indicó que esta planta administrada exclusivamente por el Vicariato, llegará el 15 de marzo a Lima para luego ser trasladada a Iquitos e instalada en el complejo centenario Padres Agustinos, en Anita Cabrera. Se tiene previsto recargar a diario y de manera gratuita unos 70 balones de oxígeno.
“Debemos esperar un tiempo a su llegada, pero tenemos que estar unidos, sabemos que se están comprando otras plantas. Debemos seguir usando mascarilla y respetar el distanciamiento, si no ninguna planta de oxígeno podrá combatir este maldito virus”, comentó tras participar en la ceremonia de entrega de 400 mil soles que fueron donados al Vicariato por parte de la empresa Tamshi.
“La colecta es un momento para unirnos y unir esfuerzos. No solo es un tema económico para juntar el dinero para la planta valorizada en 1 millón de soles. La unión nos dará la fuerza para salir de esto”, recordó.
El padre Raymundo se refirió también a la ayuda que proviene del Gobierno Regional de Loreto, señalando que la cifra descendió y que ahora solo llegan a la iglesia San Martín, entre 2 a 3 balones de oxígeno, dada su alta demanda.
“Pero no es porque no quieran, sino porque la prioridad de la única planta que tienen ahí son los hospitales, esperamos que esto mejore con la llegada de las demás plantas de oxígeno”, dijo.
