Un terrorista, dos terroristas

Resulta irónico que el Secretario General de la Presidencia de la República, Víctor Andrés García Beleunde, en tiempos que gobernaba débil y desordenadamente el arquitecto Fernando Belunde Terry, haya salido a decir en cadena nacional que la candidata del Frente Amplio tiene terroristas en su lista. Irónico porque, según el informe de la Comisión de la Verdad, cuando el líder de Acción Popular y tío de Vitocho ocupaba por segunda vez la Presidencia se cometieron abusos contra los derechos humanos y la cifra de detenidos-desaparecido fue superior a los gobiernos posteriores.

Por lo tanto los dirigentes y familiares de FBT deberían entender -ya a la distancia- mucho mejor el fenómeno de la violencia política y el fenómeno terrorista en el país. Pero más allá de las expresiones desafortunadas del actual congresista lo que debemos destacar es la respuesta dada por uno de los aludidos, es decir Abel Gilvonio Cárdenas, hijo de un condenado por terrorismo y sobrino de una dirigente emerretista. Reproduzco sus palabras, que deben ser las de muchos jóvenes.

“Sr. García Belaúnde, claramente usted no me conoce, pero opina sobre mí, atribuyéndome ideas que no tengo y prácticas que rechazo. Nada me une a la violencia ni al terror. Las rechazo sin vacilaciones, precisamente porque he vivido sus consecuencias en los años 80 y 90, cuando era menor de edad. Usar la historia de mis familiares para confundir a la opinión pública es lamentable.

De modo que le propongo que empecemos esta discusión de nuevo. Me presento: mi nombre es Abel Gilvonio Cárdenas, y soy un ciudadano del Perú, igual que usted. Soy alguien que intenta salir adelante, superando el estigma y el desprecio. Quiero afirmar la vida, y ayudar a construir un país plenamente democrático y en paz. Un país donde la política sea un intercambio de ideas y pareceres, y no una acumulación de miedos. Un país donde los derechos sean para todos y todas, y donde no nos discriminen por nuestro color de piel, por nuestro género, por el barrio donde vivimos o el apellido que llevamos.

Desde el Frente Amplio sigo con atención la campaña de Alfredo Barnechea, y creo que está haciendo una campaña propositiva. Espero realmente que siga así y que momentos como el de anoche solo sean excepciones. Recuerde, Sr. García Belaúnde, que el riesgo real para nuestra patria es el regreso de la dictadura, y no mi apellido.

Me gustaría invitarle a que venga a Comas, donde vivo, y conozca una realidad que probablemente ignora. Me gustaría invitarle a escuchar. Que juntos, examinemos nuestra historia, y que se entere de lo que soy: una persona, no un fantasma; un ciudadano, no una proyección de miedos; un peruano. Y estoy seguro que de ese conocernos comprenderemos lo más básico: que somos iguales. Porque para eso hago política: para que todos seamos iguales en dignidad y oportunidad”.

El congresista Víctor A. García Belaunde debería medir sus palabras y saber de qué y de quiénes habla cuando se refiere al período de violencia. No sólo porque es un político antiguo sino porque es un legislador con posibilidades de asumir la Vicepresidencia de la República y no está para vivir en las nubes, como bien graficaba la prensa de la época era el habitat de su tío por la que no entendía la realidad de la patria.

LLAMADA Me gustaría invitarle a que venga a Comas, donde vivo, y conozca una realidad que probablemente ignora. Me gustaría invitarle a escuchar. Que juntos, examinemos nuestra historia, y que se entere de lo que soy: una persona, no un fantasma; un ciudadano, no una proyección de miedos; un peruano.