La estación Morona del Oleoducto Norperuano sufrió un ataque por parte de pobladores de la comunidad Fernando Rosas. Según lo estimado, habría sido un grupo de 100 personas que tomaron dicha estación.
Las demandas de los ocupantes son en su mayoría de carácter social, muchas de ellas dirigida al Estado peruano. Asimismo, para que estas demandas sean escuchadas y cumplidas, 10 trabajadores se encuentran como rehenes. Según el informe que presentó PETROPERÚ, 4 son trabajadores de la propia petrolera y, los otros 6, serían contratistas.
Otra demanda de los pobladores es que la Policía Nacional del Perú no intervenga. De lo contrario tomarían acciones de fuerza contra las instalaciones y el personal retenido.
Foto referencial.