Después de sufragar, Israel, Javier y yo nos quitamos al frente de Iquitos a pasar el domingo. Estamos sentados en el mirador de Barrio Florido, bonita vista, Israel está linda, el fondo verde y azul natural le sienta espectacular; dos hombres alfa y sólo una señorita, como buenos seres racionales decidimos dirigir nuestra atención a otros placeres del momento y dejamos a la dama que siga con sus “selfies”. Dicen que nada es nuestro o en todo caso que todo nos pertenece, esto desde la lógica que la nada está en el todo y el todo es nada; en tal sentido, las ideas que se nos vienen a la mente son producto de una realidad que ya existió y se manifiesta de nuevo en la actual, en la realidad del que lo piensa. Jesús sabía eso y cuando menciono al Nazareno lo hago citando al Jesús humano, al caminante, al revolucionario; no al personaje religioso, que si bien son la misma persona, el mensaje que está en las Santas Escrituras suprime muchas cualidades más adecuadas de la enseñanza de un hombre que brindó luz; amplio conocimiento de los derechos y deberes de una sociedad que desconocía de los mismos; mensajes sobre estilos de vida básicos para la adecuada salud y demás instrucciones sencillas que hacían del camino a la sabiduría una trayecto fortalecedor; sin embargo por intereses de poder de gobierno decidieron impartir el conocimiento de Jesús a medias, suprimieron aquello que instaba a la motivación personal y potenciaron versículos de sufrimiento en esta vida a cambio de un paraíso tal cual boleto de viaje.
En fin, Jesús una vez dijo que cuando haya dos personas juntas, hablando sobre Dios (Dios = Conocimiento/Sabiduría) ahí estará Él. Somos imagen y semejanza de Dios, Dios es creador, nosotros también podemos crear, construir nuestra realidad, somos los únicos que decidimos si la pasamos triste o si decidimos avanzar hacia el éxito. Eso y más se habló en el mirador, ya Israel se cansó de tomarse fotos ahora está recostada de costado en mi changa y sus lindos pies descalzos están en las changas del loquito; la belleza y la magia sensorial – energética de la madre Tierra ya la hipnotizó; nosotros también somos parte del hechizo y lo hacemos de manifiesto en la conversación… lo esencial de la vida se manifiesta en momentos hermosos, idealistas, como también en cosas cotidianas, el sentido de la vida se dice que está en disfrutar al máximo de lo bello, no restringirse al deseo de gritar la felicidad, saborearla por completo; de igual modo con el aguardiente de los momentos tristes, pesados, estresantes, trago amargo pero imprescindible en este mundo de relatividades, por tal, cuando toque esos días en que el estado de ánimo está por debajo del promedio, no detenerse, no dejar que los pensamientos negativos quieran abarcar el día tratando de influenciar en las responsabilidades, la clave está en seguir y entender que no siempre será así. Realizar actividades generan la acción de hormonas y neurotransmisores en nuestro cuerpo relacionados con una buena estabilidad emocional, mientras si no se hace nada y se da rienda suelta a la ponzoña de la autocrítica destructiva, la baja autoestima gana cancha.
Ya estamos bajando las escaleras del mirador de Barrio Florido rumbo a Iquitos, nos cuentan a satisfacción nuestra que PPK va ganando, de inmediato surge el comentario del motocarrista que espera por nosotros: “gane quien gane, igual es joven, yo seguiré motocarreando, no me favorece ni me perjudica ninguno, mi situación y la de mi pueblo seguirá siendo la misma”; es verdad. Gane quien gane, sólo nos toca continuar con nuestros objetivos porque el cambio no empezará del electo presidencial, empezará desde la modificación de aquellos pensamientos opresores de la diversidad de ideologías, ya que la situación socio política de un territorio es consecuencia inherente del pensamiento social y el de cada uno de sus miembros; empecemos por el final.