Su majestad

En estos tiempos de elecciones de señoritas o mises de todo y por todo, nos encontramos con esta imagen que nos traslada a ese Iquitos de 1930 aproximadamente, a esos años donde también se elegían reinas y majestades, principalmente de la primavera. Pero eran mejor organizados, con mayor sutileza y creatividad. Eran soberanas que se mostraban orgullosas en corsos de ensueños por las principales calles de la ciudad. Reinas que arrancaban los piropos más galantes y elegantes. Épocas en que se las elegía por votos, en los colegios, instituciones, barrios o clubes. Dignas representantes de un pueblo que las acompañaban en esos pasacalles inolvidables.