*General Bustamante señaló que hubo una mala captación de parte de la institución.
*Habría sido testigo de un crimen y su familia sería conflictiva.

Uno de los casos más sonados es el del soldado, Ariel López D’Angelo (18) quien sufrió maltrato físico y psicológico por parte del Ejército. Sin embargo, no se actuó con celeridad y el informe del médico legista revela que no pasó nada grave.

“Es un caso heredado y con eso no libro responsabilidades. Ordené que se aperture una investigación”. El general señaló que en febrero él tuvo conocimiento del hecho, pero no supo o no quiso responder a Pro y Contra, por qué no se informó en su momento a los familiares de López. “Uno se comunica con los familiares cuando hay un caso extremo”, declaró.

Según informó, Ariel ingresó al servicio en agosto del año pasado, pero en el mes de junio fue partícipe de robo agravado.

“Tiene antecedentes complicados y su papá también tiene antecedentes conflictivos, maltrataba a la señora y al hijo… Ingresan al Ejército algunos escapando de la ley, probablemente hubo una mala captación… Este soldado trabaja con el comandante Niño, es parte de su secretaria, manifiestan que ha sido testigo de un asesinato, por ahí hay toda una historia policiaca, que estoy seguro influyó en su salud mental”, reveló, al tiempo de responsabilizarse por estas acusaciones.

Al momento, el soldado Ariel se encuentra internado en el hospital divisionario, sigue un tratamiento médico y hace unos días se le practicó una tomografía.