En décadas pasadas muchos países de Europa vivían gobernados por estados autoritarios donde imponían su poder a base de presencia militar activa y bien equipada, las guerras eran continuas, el objetivo era abarcar las mayores tierras posibles, no importaba exterminar millones de vidas si eso garantizaba expandir sus gobiernos. Hubo alianzas, como también estados vecinos terminaban siendo crueles enemigos; o peleaban o te dominaban. Cuando una persona sufre violencia física y psicológica desencadena muchas veces crisis depresivas, desmotivación, inactividad,, insociabilidad; con la misma lógica, un país, donde se desenvuelven millones de personas, que sufra constantes amenazas de bombardeos en sus tierras y que esas amenazas no queden sólo en palabras sino que se vuelven la verdad, años de guerras donde la mayoría tenía un familiar peleando contra el país adversario, sufrió una crisis global que no sólo estancó sus economías, sino que su mano de obra, sus recursos humanos, sus hijos estaban deprimidos. Sin embargo, propio del ser humano, este tipo de etapas intensas les son necesarias para que siga despertando sus mayores capacidades.
Hoy en día aquellos países que vivían en guerras mantienen buenas relaciones a pesar de las discrepancias que son imprescindibles cuando hay dos posiciones; no obstante, esta armonía se logró a raíz de primero haber peleado, el ganador adquiere el rango de líder no sólo de país sino del mundo, en tal sentido, el vencido asume su derrota y sede a las posturas del líder, que por más que no las comparta, las acepta ya que no sería sensato una pelea cuando la historia y los hechos demuestran que no ganaría. El país jefe selecciona su directiva la cuál seguro también integrará los vencidos y ellos aceptarán porque los tiempos no son los mismos, hoy si no integran esta liga global, en sus posiciones de oprimidos el mercado internacional les cerrarían sus puertas y no pudieran mantener a su gente, debido a que el sistema los alejó de la producción de sus materias primas a cambio de comprar la producción que hacen otros; por eso se dice que si bien hoy ya no hay guerras, sí sigue habiendo dominación de potencias hacia otros estados a base del sistema económico que conduce a sólo consumir mas no crear y los programas eficientes de manipulación de las masas por medio de información intrascendente- Me comentaba don Tito mientras tomábamos agua de coco heladita en su casa por la carretera; ya de regreso en el colectivo me pongo a pensar en lo que me contaba, principalmente sobre el hecho que la moral de una sociedad es una opción que tienen los ciudadanos, sin embargo esta moral se basa en dar y no recibir; primero los demás luego yo; dar la otra mejilla para que te sigan pegando, humillarse, en conclusión, ser débiles para lograr la vida eterna, ser buenos y no malos, pero la verdad es que esta bondad tiene mucho de malo ya que se busca, en la próxima vida, ser los fuertes y los que hoy les humillaron, pagarán el doble de peor, se quemarán, cargarán con sus penas miles de años mientras que ellos pasearán en verdes pastos; medito en el hecho que lo de bien y mal es relativo, el bueno tiene mucho de malo como el malo de bueno, sólo depende la óptica y la posición en la que se esté; por tal enfatizo en que las personas que son sumisas y profesan su bondad también tienen un lado malo, (si es que de bueno y malo se quiere hablar) porque si bien hoy decidieron ser débiles esto es a cambio de la fortaleza divina y de exterminar la supuesta maldad, es más hasta su maldad puede ser mas fuerte ya que es a largo plazo, como un virus que se expande constantemente. Por tal, sólo debemos seguir en avance hacia lo que se quiere, constantemente moverse en dirección al objetivo, lo bueno o malo debe ser visto en relación a si te es útil o no.