* Desde hace tres años, la emprendedora trabaja en la esquina de Navarro Cauper con Trujillo para sostener a sus hijos y motivar a otras madres a no rendirse.
En la esquina de las calles Navarro Cauper y Trujillo, Rubí Shahuano Vásquez se convirtió en un rostro conocido por sus refrescos de piña y coco helado. Madre de dos niños y cabeza de familia, inició su emprendimiento hace tres años para sostener la educación de sus hijos. “Nada es difícil cuando una madre quiere salir adelante”, dijo Rubí mientras atiende desde temprano con su agua tratada y su refresco natural a dos soles, “al alcance del bolsillo”.
Su negocio se mantiene activo todo el año gracias a la fruta que llega desde Yurimaguas. Además, ofrece cocos helados a cuatro y cinco soles, listos para consumir o llevar. Rubí aseguró que seguirá trabajando con esfuerzo y fe, e invita a los vecinos a visitarla y preguntar por ella en su esquina habitual: “Por Rubí no más”, dice con orgullo, reafirmando su deseo de seguir creciendo y motivando a más madres a emprender.
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