La medida de fuerza iniciada el pasado 28 de febrero por la Asociación Indígena de Desarrollo y Conservación del Bajo Puinahua (Aidecobap) que mantiene bloqueado el río impidiendo la salida del crudo del Lote 95 por exigencias al Estado y a la empresa PetroTal, ya genera consecuencias.
Julio Sampaya, presidente de la Junta de Autoridades Puinahua, exhortó que las fuerzas del orden desalojaran a los manifestantes en el Puinahua y que el Ministro del Interior, Alfonso Chavarry, cumpla con el acuerdo suscrito para restablecer el orden público.
“Nosotros mismos vamos a hacer el trabajo de desalojo de esta gente, si vamos a esperar su voluntad no se van a mover. James Perez dijo que la movilización va a ser indefinida y el Puinahua no va a permitir esto”, advirtió.
Sampaya indicó que con los bloqueos que genera la Aidecobap, se vio paralizado el proyecto que tienen con PetroTal, lo que solo perjudica a los alumnos de la zona a pocos días de iniciarse las labores escolares. Además, los Centros de Salud se encuentran inoperativos y las refacciones de los mismos también quedaron paralizadas.
También indicó que la población se siente amenazada por los manifestantes que están posesionados con armas de fuego.
“Se está agotando nuestra paciencia, porque un grupo no puede ser postergado al país. La población del Puinahua quiere hacer frente, no van a hacer lo que les dé la gana de paralizar las embarcaciones. Nunca van a entender, porque quieren el beneficio del 2.5 % solo para ellos”, manifestó.