El militante aprista y ex congresista, Augusto Vargas, opinó sobre la postulación de Alberto Fujimori a la presidencia, que desencadenó un debate sobre la constitucionalidad y las implicaciones políticas de esta decisión.

Recordó que el artículo 94 de la Constitución Política prohíbe explícitamente a personas condenadas ocupar la presidencia de la República, una restricción que no puede obviarse ni mediante indultos ni rehabilitaciones. Enfatizó que la Ley Orgánica de Elecciones también establece que no puede ser candidato quien haya sido condenado por corrupción, incluso si ha cumplido con la reparación correspondiente.

Vargas argumentó que permitir la candidatura de Fujimori, quien ha sido condenado en el pasado, sería absurdo y contravendría principios fundamentales de justicia y legalidad. «El indulto perdona la pena, pero no elimina la aplicación de la misma», afirmó, subrayando que Fujimori sigue siendo considerado culpable según la ley.

Sobre la estrategia política de Fujimori, mencionó que, aunque pueda contar con cierto respaldo popular, «es una pendejada política» revivir su candidatura, recordando cómo terminó su gobierno marcado por crisis generalizada, violencia y corrupción sistemática. Consideró que no es una buena estrategia electoral, pero reconoció que es un derecho de Fujimori y sus partidarios plantearla.

Finalmente, advirtió sobre las contradicciones en torno a la salud de Fujimori, inicialmente reportada como moribundo y luego mejorada para recibir un indulto humanitario. «Esto podría generar complicaciones legales y políticas adicionales», concluyó, sugiriendo que algunos podrían interpretar esta acción como un intento de asegurar una carrera política futura para su entorno cercano.

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