Los celos combinan varias emociones y surgen por la presencia de diversos factores. Entre los evidentes son las muestras concretas de tu pareja de infidelidad o un coqueteo constante con el sexo opuesto (desconocidos, amistades o ex parejas ya sea en redes sociales o en persona). También influyen los fracasos en relaciones anteriores.
Eso produce baja autoestima: poca confianza en nuestras habilidades para mantener el interés y atracción del ser amado.
El tipo de interacción con los padres puede generar dependencia, temor a la soledad, falta de comunicación, deseo extremo por el poder, el control o posesión.
También nos marcan desde niñas ciertas ideas que se repiten con constancia, como que el amor implica sufrimiento o que todos los hombres son infieles.
¿Te consideras una mujer celosa? Quizá debas autoanalizarte para saber qué sucede y cómo poder solucionarlo.