Así como hay pocos partidos que pretenden perdurar en el tiempo. Hay pocos partidos que han decidido dejar su legado en la historia peruana.
Digo ello, por la preparación que vienen ejecutando algunos de los partidos políticos existentes en el Perú a favor de sus futuros líderes, con el fin de no cometer errores al momento de seleccionar a sus representantes. Claro ejemplo de lo que digo es lo que vino sucediendo con el Fujimorismo desde el año 2016, que a lo largo de estos tres años han venido perdiendo curules en el congreso por discrepancias ideológicas o por razones personales que ya los medios comunicativos lo han dado a conocer en su momento.
… Y hablando del fujimorismo, mencionar que hace poco me invitaron a participar en la escuela de formación política de Fuerza Popular. No niego la calidad y magnitud del evento que realizaron con sus jóvenes, porque fue muy buena. Docentes de primera que dejaron una buena enseñanza. Pero mi participación en dicho evento me conllevó a pensar la carencia y la urgencia de programas formativos que tienen que tener los partidos políticos para formar a sus futuros representantes si es que pretenden perdurar en el tiempo y hacer historia (más aún, con este ambiente político de confrontación y con atentados hacia la democracia peruana).
Carencia por el poco interés que hay detrás de apostar por sus cuadros políticos existentes, ya sean estos en capacitaciones, y por la “costumbre” de siempre elegir al mejor postor (con solvencia económica) para ser representante y soporte del partido a pesar que nunca ha militado o ha sido simpatizante del partido al cual representa; y urgencia, por la falta de personas idóneas al trabajo político que tienen que realizar acorde a la ideología política del partido al cual están representando.
Sinceramente, la preocupación es mucho más grande, por parte del electorado, al momento de elegir quienes lo representen para un determinado periodo, porque ellos no saben si realmente eligen a la persona adecuada que luchará y trabajará por sus intereses, y no los suyos propios, personales. Por tal razón se admira y se realza lo que algunos partidos políticos vienen realizando a favor de sus futuros cuadros políticos, no solamente de Fuerza Popular sino también de aquellos que realmente quieren aportar al desarrollo del país. De este modo, quizás, evitaríamos huachaferías representativas, que más que generar progreso han generado atraso, y eso ya lo estamos viviendo en pleno 2019.