Cegado por los celos:
El mal efectivo policial acusado de intentar quemar su domicilio, fue trasladado hacia la comisaria de Belén, donde las investigaciones se vienen iniciando.
Cegado por los celos, y en aparente estado de ebriedad, el SO3 PNP Walker Vílchez Pacaya intentó quemar la vivienda de su suegro, donde vive con su pareja, una joven de 20 años de edad.
El origen de todo el incidente fue por un impase de celos que tuvo el policía contra su pareja, a quien no le gusta los coqueteos que mostraba la joven, cada vez que atendía a sus clientes.
Llegando al extremo, de retirar a todos los presentes del bar, para luego agredir a su conviviente, quien logró huir de la casa ubicado en la calle Aguirre 1547, para ir en busca de ayuda a los efectivos policiales del puesto de intervención rápida, ubicado en esa zona.
Al notar el desolado puesto, el policía cegado por los celos y la rabia intentó prender la casa y fue en ese momento que su pareja regresó nuevamente a su domicilio, encontrando gran cantidad de humareda que salía de su habitación. Fue allí que el padre de Valeria, familiares y vecinos del sector, salieron a increpar al desubicado agente.
Después de varios minutos de angustia y desesperación, llegaron policías, para intervenir el escándalo, al darse cuenta de que se trataba de un efectivo policial, le brindaron todas las facilidades del caso, ya que realizaron espíritu de cuerpo, para tratar de apañar el escándalo suscitado por este mal policía.