Perdedores y ganador

[ESCRIBE: Jaime Vásquez Valcárcel].

En las elecciones no necesariamente el que queda segundo lugar es el derrotado en las urnas. Esta aseveración vale para Loreto, Maynas o, si prefieren, Lima Metropolitana. Es cierto que en la capital de la República ganó Luis Castañeda Lossio con más la mitad de los votos válidos. Pero el porcentaje obtenido por el aprista Enrique Cornejo, quien fue Ministro de Transportes y Comunicaciones en el segundo gobierno alanista y de Comercio Exterior en el primer gobierno, le hace un ganador. Su candidatura es un triunfo personal porque su partido no se metió de lleno en la campaña y ni siquiera el líder Alan García se entusiasmó con su postulación. Hoy que se sabe el PAP quiere explicar las razones de su alta votación pero es evidente que los 18 puntos le pertenecen casi solitariamente.

En Loreto, luego de esa campaña demoledora emprendida por inescrupulosos contra el presidente regional Iván Vásquez Valera, se tendrá que admitir que con el segundo lugar obtenido el líder de Fuerza Loretana puede sentirse satisfecho, aunque no contento, claro. Las cifras sustentan esta afirmación. En el 2002 obtuvo el 32 por ciento de los votos. El 2006 obtuvo el 41 por ciento de los votos.  El 2010 tuvo el 31 por ciento de los votos. El 2014 obtendrá alrededor del 27 por ciento de los votos. Tiene un promedio de respaldo envidiable y que le hace y hará blanco de críticas y campañas con la intención de demolerlo usando los mismos inescrupulosos de siempre. Sus rivales políticos –con la actual excepción del líder del MIL, Fernando Meléndez- no tienen los mismos votos que mostrar. Pues siempre han estado en descenso.  Léase Alfredo Yong Quina –hoy retirado a sus cuartes agrícolas- o Jorge Mera Ramírez, quien tendrá que explicarse a sí mismo cómo ha hecho para pulverizar los 25 puntos que tuvo hace cuatro años y hoy no llega ni a los dos dígitos. Elisbán Ochoa Sosa, también es un político que parece morirá en el intento de ser elegido Presidente Regional porque incluso ha perdido importantes bastiones provinciales. Su aceptación ha ido descendiendo y es improbable que revierta esta situación. Ya mejor no hablemos de Robinson Rivadeneyra Reátegui, quien tendrá algún residuo de inteligencia para retirarse del todo a Ucayali o emprender sembríos en la región Loreto si es que quiere cosechar votos y no solamente frutos.

¿Qué agrupación es la segunda fuerza política en Loreto? La respuesta es Fuerza Loretana. Este grupo mantiene vigencia electoral –que es la que cuenta para dialogar de igual a igual en comicios nacionales- y solo en Maynas –en cuya capital se ha criticado ácidamente tanto a dicha agrupación como a sus principales representantes- tiene un tercio del electorado.  En distritos como Punchana, Belén y San Juan Iván Vásquez Valera ha obtenido mayor votación que los candidatos de su agrupación.  En provincias como Requena y Ramón Castilla, Fuerza Loretana con Iván Vásquez Valera han logrado más votos que el líder y ganador de las elecciones Fernando Meléndez Celis. Ahora bien, ¿estas cifras y la posición que tendrá en el futuro tanto IVV como FL harán que crezca en votos para comicios del futuro? Difícil saberlo. Pero lo que sí es cierto es que para el momento actual la frase: “querrán matarlo y no podrán lograrlo, querrán quemarlo y no podrán quemarlo, querrán eliminarlo y no podrán eliminarlo” cae como anillo al dedo para quien quedó en segundo lugar y a pesar de haber perdido no se le puede considerar un derrotado como sí lo son quienes tienen que celebrar victorias ajenas porque carecen de propias.