El administrador del Vicariato Apostólico de Iquitos, Miguel Fuertes, dijo en la homilía por los 157 años de Iquitos que «muchos ciudadanos se sienten como ovejas sin pastor. Las autoridades tienen que asegurar y desarrollar las condiciones para que nadie pase hambre de nada.
Fuertes recordó en su intervención en la Iglesia Matriz lo que se ha vivido el año pasado en la ciudad de Iquitos y todo el mundo y que la anterior celebración fue distinta ya que la capital loretana no sufría todavía la pandemia.
«Se ha descubierto tanto lo mejor como lo peor que hemos construido en estos 157 años», dijo Fuertes con relación a los momentos terribles que se vivieron el segundo trimestre del año pasado cuando el covid19 provocó muertes nunca antes experimentadas en la ciudad.
Fuertes también habló del Sínodo Panamazónico que reafirma los principios de sostenibilidad, democracia y justicia social. «Mejorar la calidad de vida de las personas del campo para que no tengan que emigrar a las ciudades en busca de salud y educación», dijo.
«No todos vivimos en las mismas condiciones sociales y esa es una obligación que el Estado tiene que cumplir con todos por igual», dijo en un momento de la misa Te Deum oficiada en la Iglesia Matriz de Iquitos.