- Ella quiere que la ames. “Ella quiere que la ames. Más de lo que pueda llegar a querer las cosas que le compras o las cosas que le enseñas. No hay nadie más en el planeta que pueda asumir tu papel como padre. Tu hija puede decepcionarte, cometer grandes errores, y tal vez incluso puede darte la espalda por un tiempo, pero que ni se te ocurra hacerle dudar de tu amor por ella. Mírala a los ojos y dile que la amas. Un montón.”
- Tú influyes en la elección de su futura pareja. “Es un pensamiento aterrador, pero el tipo de hombre que eres para ella tendrá un impacto directo en la pareja con la que ella decida casarse algún día. Durante años, nuestra tercera hija me suplicaba que me casara con ella cuando fuera mayor. Tuve que explicarle que yo ya estaba casado con su increíble madre. Si estás haciendo las cosas bien, entonces ella querrá casarse con alguien como tú algún día.”
- Ella se fija en cómo tratas a su mamá. “Si tuvieras que elegir una sola cosa de esta lista, tendría que ser ésta. Lo mejor que puedes hacer por tu hija es amar también a su mamá. Es fácil enfocarse sólo en los niños, pero debes luchar por tu matrimonio y hacer de esto una prioridad.”