Hacer la tarea no le gusta a nadie, sobre todo si lo único que quieren tus hijos es jugar y divertirse. Los regaños y el enojo solo te traen a ti como madre un dolor de cabeza. Existen muchos métodos para hacer que un niño haga sus quehaceres conforme se lo ordenaste, pero quizá éste puede interesarte especialmente porque es corto, sencillo y genera una costumbre o disciplina en la vida rutinaria de tus hijos que bien puede servirles de adultos.
Su nombre es el «Método de un minuto» o «Método Kaizen«, (Kai viene de cambio, Zen de sabiduría) para enseñar a tus hijos a no ser perezosos de manera sencilla. El método consiste en dejar una tarea en especial, puede ser limpiar su recámara, levantar sus juguetes, leer o hacer su tarea, algo que notes tu hijo no quiera realizar por pereza. Entonces le pides que realice esta actividad por un minuto, puedes tener un cronómetro o simplemente mirar el reloj. Es una manera fácil de hacer entender a tu hijo que la actividad terminará más rápido de lo que él o ella creen.
El verdadero reto es que esta misma actividad que debe realizar por un minuto, la realice todos los días. Cuando hayan pasado un par de semanas, entonces puedes ir aumentando la cantidad de tiempo, de 5 hasta 10 minutos por actividad.
Este método para matar la pereza es increíble con los niños, ya que les demuestra que pueden realizar la actividad con el tiempo. Además, es útil también para los adultos.