– María Freitas

Vende mandarina para educar a sus hijos

María Freitas se gana la vida vendiendo mandarinas

María nos confesó que dejará de vender cuando vea a sus hijos convertidos en  profesionales y los apoyará en la carrera que ellos elijan.

Escribe: Katty Riveros Montalván

Kattyriveros.18@gmail.com

Se levanta a las 5 de la mañana para atender a su familia y a las 7 se dirige al Hospital Apoyo Iquitos, llevando sus mandarinas para ofrecer a los transeúntes. Quiere darles una vida digna a sus hijos y convertirles en profesionales.

Los periodistas siempre la encontramos en la puerta principal del Hospital Apoyo Iquitos. Es quien mejor conoce las noticias o sucesos que ocurren en el nosocomio. María Freitas Tangoa se dedica a la venta de frutas, especialmente mandarinas. Esta humilde mujer no terminó sus estudios y por ello quiere darles una mejor vida a sus dos menores y que sean profesionales. “Yo doy mi vida por mis hijos, yo no quiero que ellos pasen por lo que yo he vivido, no pude estudiar ni tener una carrera profesional; , con la venta de mandarinas les  sacaré adelante y les convertiré en profesionales”, expresó.

Danfer ayuda a su madre en su tiempo libre

María Freitas dijo sentirse orgullosa de sus dos hijos ya que son buenos estudiantes y, además, la ayudan en sus ratos libres a vender mandarinas. Esta mujer luchadora se dedica a la venta de esa fruta desde hace más de cinco años, no gana mucho dinero, pero con lo poco que tiene ha sabido sacar adelante a su familia.

“Yo compro dos cajas, cada una me cuesta 57 soles, en la venta no gano tanto, al menos me da para comer y para pagar el colegio de mis hijos;  mi esposo me ayuda y yo lo ayudo en la pesca, a lo que él se dedica”, asegura María Freitas quien ve cotidianamente a los heridos que llegan al hospital y se conmueve con el rostro de los familiares de los enfermos.

Lady tiene 15 años, ella siempre ayuda a su madre por las mañanas y por la tarde se prepara para estudiar y sacar buenas calificaciones. Al igual que Lady, Danfer de 10 años, regresa al mediodía del colegio y se dirige hasta el hospital para ayudar a su mamá. “Mis hijos son lo más sagrado para mí y les agradezco porque siempre me apoyan, sé que juntos vamos a salir adelante. Mi familia es unida a pesar de la pobreza en la que vivimos”, refiere la humilde vendedora.

La fruta que vende a diario en las afueras del hospital Iquitos

Para Danfer su mamá es el mejor ejemplo para salir adelante y la considera su heroína. “Mi mamá es mi heroína, ella hace de todo por sacarnos adelante junto a mi papá;  sé que no tenemos mucho dinero pero ellos se sacrifican por darnos una buena educación, sobre todo una mejor vida”, manifestó.

1 COMENTARIO

  1. lindo ejemplo de madre, ojala exista muchas de ellas para cambiar esta sociedad falto de valores en la nueva generacion

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