Al cumplir un año desde que comenzó la pandemia, el gobierno regional de Loreto, no se quedó con los brazos cruzados y afrontó con creces la COVID19.
En la primera ola, el Gorel a través de las municipalidades, atendió a más de 14 mil pobladores con bolsas de víveres, también conocidas como las bolsas solidarias. Asimismo, el GOREL a través de la DIRESA compró y gestionó más de 2500 balones de oxígeno, 700 concentradores portátiles, EPP, 25 ventiladores mecánicos, medicinas, camas UCI, camas de hospitalización, entre otros materiales esenciales para combatir la enfermedad en toda la región.
En atención al llamado de las comunidades mestizas y nativas se conformaron los comandos COVID19 en Loreto, donde en trabajo articulado, el Gorel y otras entidades del estado, realizaron diversas acciones para contrarrestar la pandemia, entre ellas se fortalecieron las brigadas de salud, los vigías comunitarios y la conformación del comité técnico de expertos COVID19, quienes cumplen una importante labor en favor de la comunidad.
Gracias al trabajo en conjunto entre los tres niveles de gobierno, sector privado sociedad civil, Fuerzas Armadas, Policía Nacional, serenazgo, bomberos, entre otros, Loreto ha logrado obtener hasta la fecha 12 plantas de oxígeno: 04 de ellas adquiridas por el gobierno regional, 04 por el vicariato de Iquitos con apoyo de la población, 01 por el Vicariato de Yurimaguas, 01 de la empresa minera Buenaventura, 01 de la PCM, 01 de Petroperú, y en breve llegarán tres plantas más por parte del GOREL.
Hasta la fecha, se han registrado 75,576 casos confirmados, 3,147 fallecidos, 303 personas hospitalizadas en este momento y 69 mil pacientes dados de alta. Del mismo modo, ya se llevó a cabo la vacunación de más de 7 mil personas trabajadoras del sector salud, que trabajan en la primera línea, entre médicos, enfermeros, técnicos y etc.
Se ha registrado un descenso en los casos en la región, sin embargo, ante una posible tercera ola, el llamado de las autoridades es no bajar la guardia, no automedicarse y atenderse de manera oportuna, a fin de evitar la muerte.
A propósito, es preciso destacar la labor de los médicos y demás profesionales de la salud que arriesgan sus vidas por cuidar la nuestra. Al mismo tiempo, rendimos homenaje a las víctimas mortales del fatal virus.