El sábado se jugó la final de la Copa América entre dos selecciones de fútbol con una rivalidad histórica, por algo se le considera el clásico del continente. En esta ocasión, Argentina fue la que se llevó este mano a mano, obteniendo así su copa número 15.
Lo más resaltante no pasó en los 90 minutos, sino cuando estos terminaron. Neymar, la estrella se la selección brasilera, rompió en llanto tras haber finalizado el partido. Pero luego del lamento, fue hacia los jugadores argentinos, que se encontraban en medio del festejo, buscando a Messi, quien fue su compañero en el FC Barcelona. Ambos se dieron un fuerte y duradero abrazo mientras los argentinos saltaban al ritmo del “Dale campeón, dale campeón”.
Dicha imagen dio la vuelta al mundo y a ambos cracks les llenaron de elogios por el espíritu deportivo que mostraron. Esta no fue la imagen más destacada de la noche del sábado. Pues luego que Messi levantara la copa, él, Neymar y Leandro Paredes se sentaron en las escaleras hacia los camerinos. Se podía apreciar como los tres entablaban una simpática charla.
Esto es lo que nos dejó la Copa América 2021. Un brasilero llorando desconsoladamente y un argentino desbordando felicidad conversando luego del partido como si hubieran jugado un encuentro de barrio.
Con esta imagen queda más que claro el dicho futbolístico “Lo que pasa en la cancha se queda en la cancha”.