Jhodernet

Un asalto más qué importa

Ayer perdió la vida un empresario, cuya muerte se sumará a las estadísticas de los fallecidos en la ola de inseguridad ciudadana en que vive la ciudad y que al parecer a nadie pito le importa. El asalto que evitó el empresario Amaro Soto del Aguila, pues los malhechores no se llevaron nada, finalmente le quitó la vida minutos después, al no poder resistir los dos impactos de bala en el cuerpo. ¿Se esperará una víctima más o quizás un docena más para que recién alguien se digne a hacer algo por los pobladores de esta ciudad?

Profesionales de la salud

A pesar del paro que ayer iniciaron los médicos en el país, no fue impedimento para que los profesionales de la salud intentaran salvar la vida del empresario Amaro Soto, quien perdió mucha sangre en el trayecto al hospital. A pesar de los esfuerzos de los médicos, el empresario perdió la vida en la sala de operaciones del Hospital Apoyo Iquitos.

Cuál es el criterio

Hasta la redacción llega la información de la inauguración de una caseta de vigilancia en uno de los puertos considerados informales para dar seguridad a los que acuden a estos lugares. Si bien puede ser interesante saber quiénes llegan y quiénes salen de Iquitos, uno se pegunta: ¿Con esto se avala la informalidad? Además, también vale preguntarse ¿Cuál es el criterio para trabajar en el tema de la seguridad? Si en las inmediaciones de la empresa en que fue baleado Amaro Soto hubiese habido algunas cámaras de vigilancia, no particulares, fácil se tendrían las imágenes de estos asaltantes. Lo mismo permitiría la colocación de un verdadero sistema de seguridad. Ojalá que los próximos candidatos no nos metan cuento y de verdad hagan algo por buscar que seamos una ciudad como lo éramos hace diez años.

Cámaras de vigilancia

Seremos reiterativos que las cámaras de seguridad sí pueden contribuir en reducir el índice delincuencial en la ciudad. Quizá no se logre del todo, pero en algo permitirá que no tengamos que asistir a velatorios y entierros de personas que por intentar evitar que les quiten lo que con esfuerzo han conseguido, se los lleven así por así y que incluso hasta les cobre la vida. Que alguien salve nuestras vidas.

Bancos en la mira

Si de una mejor labor de las autoridades hablamos, no está demás hacer un serio llamado de atención a los que tienen que ver con la seguridad en los bancos. En algunas entidades financieras se respira ambiente a mercado, pues el hacinamiento es tal que no se sabe si quienes están en dichas entidades financieras están por algún trámite en especial o por algún reglaje previo a un asalto. Hay uno en especial del que nos guardaremos su nombre para evitar que luego se diga que estamos promoviendo un pánico financiero, pero que tiene en sus antecedentes el nada despreciable mayor récord de clientes asaltados luego de haber retirado dinero.

Tierra de nadie

Cuidado que al paso que va la delincuencia en esta ciudad, fácil y podremos ser candidatos a considerarse una tierra de nadie. Donde matan a quien quieran por “quítame esta paja”. Donde algunos malos extranjeros hacen de la suya en nuestras propias narices y donde tenemos autoridades y periodistas que más están preocupados en sacarse los ojos y no buscar el bien común en todos los sentidos. O es que quizá esperan que los pobladores empiecen a hacer justicia con sus propias manos.