Siempre están juntos
Este Epi y el ñaño creen que le agarran de palto a uno, en realidad no se quien les ha hecho creer que son los reyes de la viveza, cuando sus actos descubren lo limitaditos que son. Se acuerdan que Flores Quispe cuando eran gerente de la sub región de Requena negaba en todos los idiomas algún tipo de ligazón con el engreído de gobernador regional. Y con mayor razón cuando denuncias periodísticas daban cuenta de que realizaba campaña a favor de Jorge Meléndez con recursos públicos. Bueno, ahora que ya no es autoridad posa como si nada, muy campante al lado del candidato al Congreso. Ahora no tiene reparos en mostrarse como otro pepecausa más.
En política no
Primer acto: viajan trabajadores de la oficina de imagen del Gorelor a Requena. Segundo acto: viaja a esa ciudad el candidato al Congreso que tiene como principal virtud ser ñaño del gobernador Meléndez Celis. Tercer acto: Se publican imágenes de la actividad proselitista en el Facbook, donde es compartida, etiquetada o le dan “me gusta”, la gente vinculada al MIL y que demás trabajan en la gestión regional. ¿Cómo se llama la obra? Coincidencias descaradas.
Ellos carnavalean
El carnaval de los candidatos, pudiéramos llamarlo a este festejo del 2016. Porque basta con ver la cantidad que son y de todos los colores como los confetis o si quieren como esas bolas de barro que ahora venden para jugar. Así están estas los aspirantes, quienes no repararían ni un instante para convertirse en humishas para ver si siquiera así la gente les rodea. Aunque son varios los que ya están caídos desde un comienzo. O de pronto quisieran ser como el pichohuayo para que si quiera sus olor se quede impregnado en el gusto del electorado. Pero estamos recontra seguros, que son muchos los que huelen a huevo podrido. En fin, están para todo en estos días de celebración.
Vamos a Belén
Y Belén se prepara para celebrar por todo lo alto su carnaval, al que denominan “Pijuayo Loma”. Una propuesta interesante que va más allá del mero juego y que apunta en mostrar turísticamente no solo al distrito belenino y sus lugares tradicionales, sino a toda la ciudad en general. Aquí estamos para reconocer las buenas iniciativas y creemos que esta lo es, a pesar –y apostamos tres cabasinhas con añil que así será- que en medio de todo estará la orquesta de Betiuska. Por lo demás todo bien.
Esos pagos
Cómo se justifica esos pagos por imagen en el Gorelor, más si el gobernador Fernando Meléndez se pasó todo el año 2015 diciendo que estaban cargando una pesada cruz por la crisis económica. Sin embargo bastaba y basta ver, oír y hasta leer los medios de comunicación para darnos cuenta que vienen tirando la plata al fango. No hay sustento técnico posible ni plan comunicacional alguno, que justifique el que se destine parte del raquítico presupuesto que manejan a esos charlatanes, gritones y buenosparanada, que por insultar a los opositores y lamer como perros a la gestión regional pasen por caja todos los meses. Quién entiende esto.
Ya dan risa
Los líos en la UNAP van a seguir, insistimos en eso, y no porque seamos mal agüeros o queremos lo peor en esa universidad. Para nada, pero los hechos nos llevan a asegurar lo que decimos. Por un lado se siguen convocando a conferencias y hasta juramentaciones de rectores así, como jugando. Y francamente todo se muestra ante los ojos ciudadanos como un gran circo, más si es la mismísima SUNEDU, que a través de sus voceros señala que solo los unapenses solucionaran sus problemas. La pregunta es. Podrán hacerlo, querrán hacerlo. Esperamos respuestas.
Le apagaron el micrófono
Todo estaba listo para que desde hoy salga al aire con su programa radial y ¡zas! Sin más ni más le cortaron las alas. Randy Ríos se quedó peor que novio esperando en la puerta de la iglesia. Una fría comunicación le dijo que su tan mentado informativo radial no va y que seguirá en la programación de radio Diez el orador Armando Márquez. Así que todo ese cherri, el banner en todo lo alto del edificio de la emisora y televisora que está en calle Aguirre justo frente a la gruta de la virgen. Como para decir, en la misma puerta del horno se chamusca el pan.