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Caos inicial
Si así comienza cómo va a terminar Elisban Ochoa Sosa. En estos momentos, cuando todavía no asume el poder, hay disturbios, ambiciones, oportunismos que quieren medrar en el río revuelto. Hay personajes indeseables que creen que ha llegado el momento de acaparar puestos y lugares y tratan por todos los medios de monopolizar las decisiones. A ese paso el gobernador entrante perderá la cabeza y los estribos y será rebasado por sus mismas huestes. Ojalá que el citado tome el mando de su gestión y pueda dirigir los destinos del gobierno regional.
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Los congresistas repudiados
Hay quienes son capos en la crítica selectiva. Es decir, repudian a los congresistas pero a algunos los endiosan. Repudian el mal servicio de recojo de basura pero se callan cuando de una autoridad cercana se trata. Rechazan las malas obras pero cuando una persona cercana está en la gestión pública se hacen los locos. Repudian los altos sueldos pero se callan ante los montos elevados que perciben sus allegados en las empresas públicas. Eso sucede con los “críticos” de los congresistas. Se quejan, repudian y critican a los congresistas de otras regiones pero cada vez que un congresista loretano llega por Iquitos son capaces de cargarles hasta el maletín. No es así, no debería ser así. O todos son malos por estar en el Congreso o mejor que busquen otro rubro. Si tomamos en cuenta los resultados del referéndum los cuatro congresistas son repudiados. Es decir, Patricia Donayre, Tamy Arimborgo, Juan Carlos del Águila y Jorge Meléndez son los repudiados del año.
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El mal está hecho
Ya corregimos errores, dijo triunfalmente el ciudadano Elisban Ochoa Sosa. Declaró que hizo una reestructuración de la transferencia que se llevaba a cabo. Pero no basta eso. Se trata de cortar las alas, de dejar de lado, a aquellos personajes que tratan por todos los medios de conseguir poder. Ese es el verdadero problema para una gestión que todavía no se inicia. Y si desde el saque muestra ese nivel de disturbio y de desavenencia cómo será cuando intente gobernar en los hechos. Así las cosas, Elisban Ochoa tiene una ardua labor para enderezar la nave del partido que arribó al poder regional.
La protesta de los militantes
Lo peor de este asunto es que lo militantes de la espiga, aquellos que se fajaron durante la campaña electoral, se sienten ninguneados, marginados y desplazados. No están contentos con el trato que reciben y están dispuestos a tomar medidas para que sean tomados en cuenta. Se sienten traicionados por su líder y en varios medios han dejado sentir su incomodidad y su protesta. Así las cosas, hay como una fisura o una brecha en el partido ganador que hará inviable un gobierno de consenso. Corresponde a Elisban Ochoa tomar medidas para evitar el resentimiento y el desbande. En sus manos está controlar la situación.
Mala obra
En la licitación del mercado Modelo hay situaciones adversas que la Contraloría ha observado. Una de ellas es el escaso número de puestos de venta que promueve la obra. Los vendedores de ambos sexos son mucho más que esos puestos ofertados y se supone que en su momento protestarán al ser dejados de lado. Sería conveniente que se corrija ese impase y que los puestos sean los que requieren los vendedores. No pueden ser dejados de lado gracias a la construcción de la obra. Todavía se está a tiempo de evitar un desborde social.
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La basura otra vez
Este fin de semana fue desastroso para la ciudad de Iquitos debido a la presencia de basura en diferentes calles, esquinas y veredas. Los carros recogedores simplemente no se presentaron y los promontorios acostumbrados incrementaron los desperdicios. Así, en esas condiciones de suciedad se hizo el proceso de votación. Así, en esas condiciones antihigiénicas, se conocieron los resultados de las 4 preguntas. Así, en esas condiciones deplorables, se vive hoy mismo y lo peor es que todavía no pasan los carros recogedores. Ello, lógicamente, ocasiona molestias y malestares en los moradores de la ciudad.
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Campaña de los choros
El reciente robo de 50 mil soles indica que la campaña navideña y de fin de año de los cacos ya comenzó. Y comenzó con éxito rotundo pues se salieron con la suya luego de haber hecho un forado hacia una vivienda. Nadie escuchó nada y los ladrones robaron con toda impunidad. El inicio de esa campaña debe llamar la atención de las autoridades para poner en marcha un plan tendiente a evitar los desmanes de los choros. Las fiestas de fin de año no deben ser el festín de los delincuentes. Es necesario que se haga algo para prevenir los futuros robos y asaltos.
Estorbos en las veredas
No se sabe a quién acudir para impedir que ciertas personas pongan sillas o motos en las veredas. Es una costumbre que obstaculiza el simple paso o el libre tránsito. Lo peor de todo es que si alguien reclama de inmediato recibe una andanada de groserías e insultos. Sería conveniente que los municipios dispongan que queda terminantemente prohibido poner sillas o motos en las veredas. Todo ello bajo pena de multa.
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