Julio Magán, jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), justificó la instalación de cuatro cámaras de seguridad en el penal de Barbadillo, en la Diroes, donde el condenado expresidente Alberto Fujimori, permanece recluido.
El funcionario aseguró que el objetivo de la medida es dar seguridad al penal y rechazó que se vaya a violar así la «privacidad o el derecho a la intimidad del interno Alberto Fujimori».
Precisamente, el exmandatario denunció el caso a través de una carta, mientras que su hijo, el congresista Kenji Fujimori, dijo sospechar que las cámaras fueron puestas por el advenimiento de la campaña electoral.
El jefe del INPE respondió que las cámaras han sido instaladas en áreas comunes del penal, como son la puerta de ingreso, la zona de prevención, el pasadizo y el jardín.