Cuatro comunidades indígenas de la etnia Ticuna se han visto obligadas a dejar sus territorios en la provincia de Ramón Castilla debido a la incursión masiva de grupos de narcotraficantes armados que, en los últimos días, han sembrado el terror con sus continuos enfrentamientos, los cuales han dejado cuatro personas muertas.
Las comunidades tomadas por los narcotraficantes son Hawái, Ramón Castilla, Mario Rivera y Gamboa, donde cuatro escuelas han tenido que cerrar sus puertas porque, prácticamente, ya no quedan pobladores. “Tras las denuncias, hemos ido a estas comunidades y hemos comprobado que no hay habitantes y que las viviendas están vacías. Por ello, tuvimos que cerrar las escuelas y, por seguridad, trasladamos a los docentes a Caballococha”, informó el director de la Unidad de Gestión Educativa Local de Ramón Castilla, Marco Vásquez Soplín.
Según el funcionario, los narcotraficantes tendrían el propósito de instalar campamentos para procesamiento de drogas en el lugar. Una de las comunidades más afectadas es Gamboa donde, el pasado 12 de abril, unos 30 delincuentes maltrataron a los pobladores y los llevaron hasta una cancha para amarrarlos y amenazarlos de muerte si no se retiraban.
Ante la gravedad de los hechos, la Dirección Regional de Educación convocó a las autoridades del gobierno regional y de la Policía a una reunión de urgencia. El presidente regional Iván Vásquez Valera dijo que una comisión de funcionarios de la región, de la Policía y de la Marina de Guerra visitará la zona para oír el testimonio de los pobladores. Asimismo, demandó a los ministerios de Defensa y del Interior que refuercen la vigilancia en la frontera.