* La Santa Sede designó a un visitador apostólico para investigar los cuestionamientos al prelado, relacionados con conductas impropias y manejo del patrimonio.
El Vaticano oficializó la renuncia de monseñor Ciro Quispe López como obispo prelado de Juli, en Puno, luego de las denuncias que generaron reclamos de comunidades católicas en la zona sur andina. La decisión fue publicada en la sección Rinunce e Nomine de Vatican News, donde se informó que el papa Francisco aceptó su dimisión al gobierno pastoral de la prelatura.
La salida de Quispe, de 50 años, ocurre mientras sigue abierta una investigación canónica a cargo de monseñor Marco Antonio Cortez Lara, obispo de Tacna y Moquegua, designado visitador apostólico en julio pasado. Las acusaciones contra el exprelado incluyen presuntas conductas sexuales impropias, malos manejos económicos y modificaciones no autorizadas en templos históricos, lo que provocó un fuerte descontento entre feligreses y comunidades.
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