En el marco del proyecto “Integración Regional Participativa en la Comunidad Andina – INPANDES”, implementado por la CAN y la Unión Europea, seis nuevas acciones piloto se desarrollarán en las Zonas de Integración Fronteriza de la subregión andina y dentro de ellos, el proyecto “Integración, inclusión e innovación en el corredor productivo transfronterizo Napo – Amazonas” será ejecutada por el Proyecto Especial Desarrollo Integral de la Cuenca del Río Putumayo – PEDICP en Convenio con la Municipalidad Provincial Mariscal Ramón Castilla con un periodo de ejecución de dos años a partir del 1 de diciembre del presente año, y una inversión total de 1,450,000 Euros.
La acción se desarrollará en dos franjas territoriales del Perú, ubicadas en las Zonas de Integración Fronteriza de Perú-Colombia y Perú–Ecuador, en localidades ubicadas en la provincia de Mariscal Ramón Castilla, cuenca del bajo Amazonas entre las poblaciones de Chimbote y Bellavista Callarú (en el Trapecio Amazónico) y en la provincia de Maynas, en la cuenca del Napo entre las comunidades aledañas a Cabo Pantoja, respectivamente.
El proyecto busca promover el desarrollo económico y social, con base en la generación de trabajo, ingresos, servicios sociales y empleo en las Zonas de Integración Fronteriza, además de fortalecer las capacidades de los gobiernos locales e instituciones, mejorar las condiciones de vida de la población fronteriza binacional y crear empleo digno.
Este proyecto comprende la instalación de Un Centro de Producción e Innovación Tecnológica para dar valor agregado a la producción del cacao (chocolate y otros), pescado (embutido y filetes); reproducción inducida de alevines (Paco y gamitana) y producción de alimentos extruzados, que beneficiará directamente a un total de 348 familias de 20 comunidades.
Para la ejecución del Proyecto, El PEDICP cuenta con cuatro oficinas de extensión implementada con personal técnico especializado permanente en la zona, que contribuirá a fortalecer la ejecución de las actividades, así como, la experiencia necesaria para la implementación y desarrollo del referido proyecto.
Comunidad Andina y Unión Europea implementarán seis nuevos proyectos de desarrollo en fronteras de la subregión
En el marco del proyecto “Integración Regional Participativa en la Comunidad Andina – INPANDES”, implementado por la CAN y la Unión Europea, seis nuevas acciones piloto se desarrollarán en las Zonas de Integración Fronteriza de la subregión andina.
De acuerdo a lo informado hoy durante la reunión del Comité de Dirección del Proyecto INPANDES; en la que participaron representantes de los Ministerios de Relaciones Exteriores de Bolivia, Ecuador y del Perú, de la Secretaría General de la Comunidad Andina y de la Delegación de la Unión Europea en el Perú; el presupuesto total del proyecto asciende a más de 9 millones de euros.
Para la Zona de Integración Fronteriza Bolivia – Perú se presentaron las siguientes propuestas de proyectos: “Integración, inclusión e innovación en cadenas productivas transfronterizas con base territorial”; “Aprovechamiento de las aguas de la cuenca del lago Titicaca para la dotación de agua potable en un contexto de cambio climático” y “Desarrollando Innovaciones para la Seguridad Alimentaria y Nutricional”.
En tanto, para la Zona de Integración Fronteriza Colombia – Ecuador se presentó el proyecto “Diseño e implementación de un modelo de desarrollo territorial fronterizo para la mejora de las condiciones ambientales y de vida en la cuenca hidrográfica alta del Río Carchi en Ecuador y para la Zona de Integración Fronteriza Colombia – Perú la iniciativa “Integración, inclusión e innovación en el corredor productivo transfronterizo Napo – Amazonas”.
Finalmente para la Zona de Integración Fronteriza Ecuador- Perú se presentó el proyecto “Desarrollo e Integración Urbano – Rural de localidades vecinales fronterizas”.
Los seis proyectos buscan promover el desarrollo económico y social, con base en la generación de trabajo, ingresos, servicios sociales y empleo en las Zonas de Integración Fronteriza, además de fortalecer las capacidades de los gobiernos locales e instituciones, mejorar las condiciones de vida de la población fronteriza binacional y crear empleo digno.