Javier Vásquez
La palabra proviene del griego climater y significa escalera. Es un proceso durante el cual la mujer pasa de la etapa reproductiva a la no reproductiva. Cuando en éste proceso se presentan síntomas se utiliza el término Síndrome climatérico. Cuando llega antes de los 40 años es considerada como temprana y cuando aparece después de los 52 se considera tardía.
El climaterio se divide en Premenopausia que comprende desde el inicio de los síntomas hasta el inicio de la menopausia. La Menopausia va desde la última menstruación y hasta doce meses seguidos de ausencia de la menstruación. La Posmenopausia es el periodo entre cinco y diez años subsiguientes a la menopausia.
Entonces remarcamos que la menopausia es el cese permanente de la menstruación y se diagnostica tras un año consecutivo de amenorrea (ausencia de la menstruación) sin la existencia de otra causa. Es el resultado de la pérdida de la actividad folicular ovárica, esto quiere decir que la mujer ya no puede ovular y, por lo tanto, no tiene capacidad de embarazarce.
El climaterio es una etapa fisiológica en la vida de la mujer, por lo que no siempre es necesario administrar un tratamiento farmacológico. Pero si aparecen aparecen muchos síntomas que pueden llegar a ser muy molestos y afectar su vida diaria sí precisan de este
Se debe dejar claro que todo tratamiento para los síntomas de la menopausia tiene efectos beneficiosos, pero también efectos secundarios, por lo que los fármacos deben emplearse cuando sean necesarias, o sea, cuando se presenten síntomas, durante el tiempo que estos duren, por lo que no está indicado el tratamiento farmacológico para prevenir la aparición de los síntomas.
Los síntomas que se presentan son variados y pueden ser sudoraciones, bochornos, cambios en el sueño, desgano, irritabilidad e inestabilidad emocional, disminución del libido (deseo sexual), dolores articulares y musculares, atrofia de los genitales llevando a irritabilidad de la vagina con dispareunia que es el dolor con las relaciones sexuales. La piel pierde colágeno por lo que se adelgaza, volviéndose frágil y quebradiza, se acentúan las líneas de expresión dando origen a las arrugas. También aumenta el colesterol malo, disminuyendo el bueno lo que lleva a mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Cuando está indicada la administración de fármacos la primera línea de estos es lo que se conoce como TRH (terapia de reemplazo hormonal) y generalmente son fármacos que tienen estrógenos y progesterona. Los estrógenos alivian los síntomas del climaterio y la progesterona evita un efecto secundario de estos que es la hiperplasia endometrial. Los riesgos, aunque pequeños de estos fármacos se asocian a adenocarcinoma de endometrio (si se usan solo estrógenos), aumento del riesgo de cáncer de mama cuando se administran por periodos largos, al igual que cáncer de ovario. Hay también riesgo aumentado de enfermedad tromboembólica y de desarrollar cálculos biliares.
Otros fármacos son la tibolona que es un esteroide sintético de acción estrogénica, las fitohormonas u hormonas derivadas de la soya, cuya principal acción está en la disminución de los bochornos. Cuando existe osteoporosis se indican difosfonatos que impiden la resorsión ósea y aumentan el contenido de calcio en los huesos.
Las medidas dietéticas también son importantes: 1.5 mg de calcio al día, vitamina D, reducción del colesterol. Se debe practicar un tipo de ejercicio en forma regular para evitar la osteoporosis.
Lo mejor es acudir a su médico para que le oriente y le explique con más amplitud la conveniencia o no del tratamiento farmacológico.