[Escribe:Paco Bardales]
Útero de Marita
Madre de Dios es probablemente la región más biodiversa del país. La riqueza natural que se puede encontrar en sus bosques es espectacular. Sin embargo, no todo es belleza y vida.
Madre de Dios es una de las regiones más pobres y olvidadas del país, también. Donde la convulsión social permite que emerjan figuras controversiales, productor del mismo abandono del Estado.
Luis Otsuka tiene 64 años, así como un ímpetu y vehemencia que pocos y extraños le reconocen. Figura reconocida del mediano empresario no limeño, hasta hace poco fue presidente de la Federación Minera de Madre de Dios, la más poderosa organización sindical de dicha región.
En un país que, se estima, tiene a más de 50 mil mineros no formales, Madre de Dios se erige como un territorio donde estos son una fuerza social, económica y política importante. Y su actividad ha seguido creciendo, no obstante el relativo freno que se dio a nivel nacional.
Por ejemplo, el año pasado la actividad extractiva de este sector creció alrededor del 20% en la región. En tanto, el volumen de producción de oro de la región equivale al 10.5% de la producción nacional. De los 5 millones de onzas de oro que exporta el Perú anualmente, el 22% proviene de extracción no formal.
Otsuka siempre se ha preciado de ser un luchador en la vida. Católico ferviente, piloto de aviones, ha sido de los que se la pasan resistiendo constantemente a los embates del gobierno y las grandes empresas que quieren tumbarse a su movimiento (un buen perfil de su personalidad es este, escrito por Gabriel Arriarán).
Otsuka ha sido uno de los más notorios dirigentes opositores al proceso de formalización minera que implementa el gobierno de Ollanta Humala. Los enfrentamientos entre pobladores y las fuerzas policiales han sido constante. Incluso, el dirigente minero ha sido detenido y acusado penalmente en Arequipa este año, por el bloqueo de la Panamericana Sur, durante una movilización minera nacional.
La ubicuidad de Otsuka lo ha llevado a presentarse como candidato a la presidencia regional de Madre de Dios con el movimiento Democracia Directa (¡vaya nombre!). Con el 29.5% de los votos, se quedó raspando la victoria y ahora va a una segunda vuelta con Simón Horna, candidato del Movimiento Independiente Amor por Madre de Dios, que obtuvo el 26.1%.
La propuesta de Otsuka para la región es bastante genérica en otros aspectos que no sean dictar una agenda antisistema, defensor acérrimo de la minería ilegal que se resiste a la formalización y a las respectivas contribuciones en impuestos. Ha hablado fuerte para que se deroguen las leyes que prohíben el uso de dragas, que se detengan las interdicciones y el reconocimiento del Estado a la actividad minera que su organización realiza.
En el Perú, estima José Luis Barranzuela, de la Universidad de Piura, 2,600 millones de dólares anuales serían movidos por la minería ilegal.
Los impactos graves al ecosistema son plausibles. El diario El País de España, en un impactante reportaje, recogía el dato de un estudio de la Universidad de Stanford, en el cual un 75% de las personas analizadas en Madre de Dios portaban niveles de mercurio mayores que el máximo permitido. Además, el 60% del pescado de los ríos estaba altamente contaminado y no era apto para consumo humano.
El Ministerio del Ambiente ha estimado en casi cincuenta mil hectáreas de bosque las afectadas por la minería ilegal en Madre de Dios.
Además, el problema de la trata de personas y explotación sexual es más que evidente (uno de los primeros reportajes que advirtió el tema fue este, de Dánae Rivadeneyra)
Otsuka es uno de los principales beneficiarios de la actividad económica que genera la minería ilegal. Por ejemplo, este reportaje lo muestra indicando a un extractor ocultar el uso de mercurio dentro de los campamentos:
Un reciente reportaje del programa televisivo Cuarto Poder denunciaba que Otsuka, escudándose en su condición de dirigente, tiene una concesión de 300 hectáreas en Tambopata, de la cual una parte consideraba se encuentra dentro de un área boscosa intangible, y que se estarían realizando trabajos de minería ilegal dentro de esta zona:
En reciente artículo, el analista Róger Rumrrill señala: “Madre de Dios es el máximo ejemplo de que las políticas únicamente represivas sin su correlato social y económico obtienen victorias pírricas.”. Refiriéndose a los políticos que gobiernan las regiones amazónicas (de los que Otsuka es muestra palpable), indica que son herederos o legatarios de los ciclos extractivos, con visiones cortoplacistas y extractivistas y “han dejado marcas indelebles en la sociedad amazónica creando una subcultura de la dependencia”
Otsuka es favorito para ganar las elecciones en Madre de Dios, a pesar de las resistencias que puede generar en un sector de la población. Sin embargo, su rival, Simón Horna, del movimiento Amor por Madre de Dios no es para nada inocente.
Horna fue uno de los promotores del paro minero que se llevó a cabo en abril de este año y dejó cuatro muertos. Además, lleva como vicepresidente de su lista a Aquiles Velásquez, ex líder de la Federación Minera de Madre de Dios y crítico acérrimo de la formalización.
Por lo menos ocho agrupaciones políticas llevaron en estas elecciones a personajes ligados con la minería ilegal en Madre de Dios. Malas noticias para la biodiversidad y la formalización en la región.