Para toda la cara: Inhala profundo por la nariz. Haz un puño con las manos y aprieta todos los músculos faciales. Exhala al tiempo que abres la boca y sacas la lengua; mueve los ojos hacia arriba y abre las manos. Repite tres veces. Además, con esta posición estimulas el tracto digestivo y estimulas la circulación sanguínea.
Estimula cuello, mandíbula y hombros: Inclina tu cabeza hacia atrás y mira el techo. Relájate. Traga saliva y presiona la punta de la lengua en el tope del paladar superior. Gira la cabeza ligeramente hacia la derecha y traga saliva. Repite tres o cuatro veces.
Trabaja cachetes: Llena de aire los cachetes y transfiere el aire de un lado al otro, hasta que te quedes sin aire. Repite cuatro veces.
Fortalece los labios: Sonríe y eleva las comisuras de los labios hacia arriba, pero mantén una mirada neutral. Mantente relajado por unos minutos.
No olvides la frente y los ojos: Abre los ojos como si estuvieras sorprendido, pero no arrugues el entrecejo o la frente. Fija tu atención en un punto en el horizonte por 10 segundos. Repite cinco veces. Este ejercicio para las arrugas es ideal para los que pasan mucho tiempo en la computadora.