[Han pasado ya 16 años desde que las Naciones Unidas declararon el 25 de noviembre como Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Aunque en este tiempo el Perú ha logrado muchos avances en materia de defensa de los derechos femeninos, aún falta mucho por hacer, sobre todo en el tema de la prevención, pues las situaciones de maltrato se siguen repitiendo en diversas regiones del país y las mujeres, en lugar de denunciar, siguen defendiendo a sus agresores].

El próximo año se incluirán en el currículo escolar contenidos sobre prevención de estos casos.

Este año 41,297 peruanas han sido víctimas de maltratos en el Perú y se han registrado 74 feminicidios, así como 161 tentativas de feminicidio, según la estadística del Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Sexual ‘Contigo’ del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables.

Aunque las cifras revelan que ocurren siete asesinatos de mujeres al mes y 16 tentativas, se estima que estos solo representa la mitad de los casos. Por ello, la directora de ‘Contigo’, Amparo Muguruza, instó a las víctimas de violencia a que denuncien los hechos. “Pese a que hay más denuncia, no es suficiente. Si la mujer se queda callada, la violencia crece y puede llevar al feminicidio”, advirtió.

OFENSAS VERBALES

Al respecto, el Instituto Nacional de Salud Mental difundió un informe que revela que el 5% de las mujeres con pareja que residen en Lima han recibido algún tipo de agravio al menos una o dos veces al mes (maltrato sistémico) en el último año. Los insultos, las agresiones verbales u ofensas son los más frecuentes, seguidos del abuso físico y abuso sexual.

De acuerdo con el estudio, las mujeres que no habían denunciado los casos de maltrato señalaron que no lo hicieron porque no lo consideraron grave (50.1%) o porque pensaron que la pareja iba a cambiar (35.3%). Lo peor es que cuatro de cada 10 mujeres aseguró que reiniciaría relaciones con su agresor si tuviera la posibilidad de volver el tiempo atrás.

Humberto Castillo, director general del Instituto Nacional de Salud Mental, refirió que las acciones de violencia afectan la salud mental y*pueden ser causa de depresión, trastorno de estrés postraumático, insomnio, trastornos alimentarios, sufrimiento emocional e incluso intento de suicidio. Además, los niños que crecen en familias con ambientes de violencia pueden sufrir diversos trastornos emocionales y de conducta.

Ante ello, Muguruza señaló que las mujeres víctimas de violencia pueden denunciar las agresiones y recibir atención legal, psicológica y social en los 238 centros de Emergencia Mujer que operan en 196 provincias del país. También dijo que el Sistema de Atención Urgente (SAU) brinda ayuda inmediata a las mujeres que se encuentran en alguna situación de peligro y el Ministerio de la Mujer cuenta con 39 casas refugio para las víctimas que no cuentan con una red de soporte familiar que las acoja ante una emergencia.

PREVENCIÓN DESDE LA INFANCIA

“Sin embargo, lo más importante es la prevención, para que estos casos no ocurran más. Por ello, desde el próximo año se implementarán contenidos sobre la prevención de la violencia en la currícula escolar. Ya estamos trabajando en la capacitación de los directores y docentes de 480 escuelas del país y esperamos llegar el próximo año a las 1,000 escuelas que tienen horario ampliado”, sostuvo.

La funcionaria señaló que se trata de un trabajo “muy de hormiga” que busca cambiar estereotipos, costumbres y formas de relaciones entre mujeres y hombres. “Es un trabajo complejo cuyos resultados se irán viendo de poco, aunque a largo plazo, serán efectivos”, sostuvo.

El programa ‘Contigo’ trabaja además con la Policía, para capacitar a los efectivos que reciben a las mujeres víctimas de agresión, y del mismo modo con las Fuerzas Armadas, a quienes orienta ante los elevados niveles de violencia que se registran en las familias militares.

Adicionalmente, en los Centros de Atención Institucional (CAI) también se trabaja con los varones que han sido sentenciados por el Poder Judicial tras denuncias de violencia. “A ellos se les reeduca para el abandono de conductas violentas, a través de atención psicológica y un acompañamiento en la familia”, dijo Muguruza.

VIOLENCIA CRECE

Pero, pese a todos estos esfuerzos, José Anicama, decano de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma, refirió que un estudio de esa casa de estudios determinó que actualmente 38 de cada 100 mujeres son víctimas de violencia física en el Perú.

Para el psicólogo, una de las causas principales del crecimiento de la violencia estaría relacionada a la falta de comunicación entre las familias. “De cada 100 familias, 48 no tienen una buena relación, por lo tanto, no tienen buenos modelos de comportamiento y de valores y si a eso le sumamos factores como alcohol, drogas y celos, la situación se agrava”, dijo.

Otro factor desencadenante de la violencia es la falta de afecto en la familia. “Actualmente en las familias no hay cariño positivo, y la falta de afecto genera un aprendizaje de comportamientos hostiles que se siguen repitiendo y se deben de modificar”, manifestó.

RECONOCE A LAS VÍCTIMAS

Frente a esta situación y como parte de la campaña nacional ‘No te calles’, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables inició la distribución de las cartillas de identificación de riesgo contra el feminicidio, la cual, a través de una serie de preguntas, puede ayudar a las mujeres a identificar las señales de riesgo sobre la violencia que puede estar sufriendo una persona. (peru21.pe)