Vecinos tuvieron que llamar a emergencias para ayudarlos

La mañana del domingo, conductores y peatones que se desplazaban por la intersección de las calles Sargento Lores con Huallaga en el distrito de Iquitos,  encontraron a un hombre que vestía polo morado, pantalón jean y zapatillas de color gris. Quien de manera reiterada intentaba ponerse de pie y caía repetidas veces contra el suelo. Debido a sus lesiones llamaron al serenazgo de Maynas quienes llegaron a bordo de una móvil en compañía de la policía nacional.

Luego de identificar al agraviado como Jean Carlos H.Q (28) fue llevado al hospital de apoyo Iquitos donde fue atendido por los médicos del área de emergencia. Luego de evaluarlo, lo dejaron en observación. Según refirió a la policía durante la madrugada había tomado bebidas alcohólicas con un grupo de mujeres que lo habrían pepeado para quitarle su billetera y celular.

La mañana del lunes, tres personas más fueron encontradas aparentemente pepeados por ciudadanos de Iquitos. El primero fue encontrado durante la madrugada en la intersección de las calles Iquitos con San Antonio en el distrito de Iquitos, se trataba de un homosexual que fue abandonado en la vía pública por sujetos que lo despojaron de sus pertenencias como billetera, celular y calzado. El segundo fue encontrado durante la madrugada en la cuarta cuadra de la calle Vargas Guerra en el distrito de Iquitos cerca de la UGEL Maynas, el hombre fue abandonado en la loza deportiva donde fue despojado de su celular y billetera. El tercero fue encontrado en la cuadra siete de la calle Nauta, inconsciente en una vereda fue despojado de sus objetos de valor y de su calzado.

Los vecinos que fueron testigos del hecho dieron aviso a la policía y serenazgo, luego de varias horas las presuntas víctimas de peperas, fueron llevadas a diferentes hospitales donde fueron atendidos por médicos de emergencia y tras evaluarlos los dejaron en observación hasta que retomaron la conciencia. “Es impresionante la falta de seguridad durante las madrugadas, es fácil dejar a una persona en la calle y luego robarle sus cosas. Las autoridades como serenazgo y policía esperan la muerte de alguien para empezar a hacer bien su trabajo”, dijo el señor Javier Ricopa, vecino.