José Manuyama, vocero del Comité de Defensa del Agua, opinó sobre la decisión judicial sobre una concesión minera en el río Nanay, un caso que podría tener un impacto determinante en las zonas aledañas y sobre el cual él manifiesta tener un conocimiento profundo. Manuyama expresa su preocupación por la posible alteración del equilibrio ecológico de la región y sus efectos en la vida diaria de los residentes.
La comunidad de Iquitos está especialmente preocupada por los impactos ambientales y de salud que podrían derivarse de esta concesión, destacando los riesgos asociados con el uso de mercurio en las actividades mineras. Los habitantes temen que esta sustancia tóxica contamine las fuentes de agua y afecte gravemente la salud de las personas y el ecosistema local.
Manuyama destacó la falta de apoyo gubernamental en la protección de los recursos hídricos y subraya la necesidad urgente de una acción conjunta para salvaguardar estos vitales recursos naturales. Hizo un llamado a la ciudadanía para que se una en la defensa del río Nanay, enfatizando que la protección del agua es fundamental para el bienestar de la comunidad y del medio ambiente.
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