Los niños tienen la capacidad de arreglar estas situaciones, descubre cómo solucionar las peleas entre hermanos con solo 3 palabras.
Las peleas entre hermanos en cualquier etapa y en cualquier edad son normales y aceptables en algunos casos. Si notas que las peleas aumentan y tus hijos no pueden ni siquiera verse, es hora que evalúes tus actos y no solo los de ellos.
Cuando un hijo nos pone queja es posible que sin darle la oportunidad al otro de explicarse y recurrimos a un castigo. Es actuar cómo juez de la situación solo beneficia a un niño mientras el otro puede guardar rencores hacia ti o su hermano.
Las palabras mágicas para este tipo de situación son las siguientes: «¿Cómo pueden mejorarlo?». Así de simple, se trata de encontrar un acuerdo y una solución que beneficie a ambos partidos. Cada uno puede exponer su caso y juntos pueden ver qué es lo que mejor les conviene, ellos tienen la capacidad de arreglar este tipo de situación aunque no lo creas.
Verás cómo con el tiempo ya no necesitarán de tu ayuda para llegar a un acuerdo, sin mencionar que desarrollas su habilidad para buscar soluciones en vez de problemas. No dudes en intentar esta sencilla técnica.
