La depresión infantil es un trastorno psicológico que va en aumento en los niños y niñas, de cada 100 niños, entre 2 y 5 presentan un cuadro depresivo, que comúnmente es ignorado por los padres, maestros e incluso los pediatras, pues existe la creencia de que la infancia es la etapa más feliz de cualquier persona y que los niños no se deprimen.
Aunque sería ideal que estas creencias fueran verdaderas, la realidad es que los niños y niñas pueden padecer depresión desde edades tempranas e incluso pueden llegar a tener pensamientos suicidas y consumarlos; para evitar una tragedia, es preciso poner atención al comportamiento de nuestros hijos e hijas y estar atento a las señales que nos envían con sus actos.
La depresión infantil puede manifestarse en niños y niñas que pasan por un proceso de divorcio, la pérdida de un ser querido, baja autoestima e incluso puede presentarse debido a que son criados por padres que también sufren depresión.
Algunas señales para saber si tu hijo está deprimido tienen que ver con su estado de ánimo, el cual varía dependiendo de su edad; en los niños en edad preescolar se puede identificar como síntoma de depresión cuando tienen berrinches prolongados por algo muy mínimo, sabemos que los niños de esa edad lloran con mucha frecuencia, pero si llora por todo, debes estar alerta. Los preescolares deprimidos tienen expresión triste y tienen una comunicación verbal limitada.
En cuanto a los niños de 6 a 11 años, ya pueden expresarse mejor mediante el habla y describir sentimientos de tristeza, a los que hay que poner atención y tomarlos en serio; si el niño dice que se siente mal, se debe escucharlo, pues aunque la depresión en niños también tiene síntomas físicos como dolor de cabeza o de abdomen, puede que vaya más allá y se debe recurrir no sólo al pediatra, sino al psicólogo.