El transporte terrestre entre Perú y Bolivia permanece totalmente interrumpido este miércoles debido a las manifestaciones convocadas en el marco del Paro Nacional Unitario. Uno de los puntos más críticos es el Puente Maravillas, ubicado entre Juliaca y Cusco, tomado por manifestantes en la madrugada del martes.
La ruta bloqueada es utilizada por cientos de turistas que, tras visitar Machu Picchu, se dirigen a Puno para conocer el Lago Titicaca, las islas flotantes de los Uros, Amantaní y posteriormente cruzar hacia Copacabana y La Paz, en Bolivia. La medida afecta gravemente tanto al turismo internacional, como al comercio fronterizo y regional. Asimismo, el transporte de mercancías hacia el país vecino ha quedado paralizado, impactando negativamente en la economía local.
A la par, otro punto clave afectado es el Puente Internacional de Ilave, en la provincia de El Collao, donde desde las 4:00 a.m. manifestantes instalaron una estructura metálica que impide el paso de vehículos. La interrupción del tránsito en esta vía estratégica también ha dejado varados a pasajeros de transporte interprovincial y vehículos de carga.
Los manifestantes —integrantes de organizaciones sociales, gremios de trabajadores, comerciantes, estudiantes y ronderos— exigen al Gobierno de Dina Boluarte y al Congreso de la República una serie de medidas frente a problemas estructurales. Entre sus principales demandas figuran:
- La conclusión del Gasoducto Sur Andino.
- La cancelación de proyectos mineros como Tía María y La Tapada, por sus impactos ambientales.
- El rechazo a leyes que, según denuncian, favorecen al crimen organizado.
- Acciones urgentes frente a la creciente inseguridad, extorsiones y asesinatos que afectan especialmente a transportistas y comerciantes.
Hasta el momento, no se han registrado enfrentamientos. Sin embargo, la situación permanece tensa y con alta presencia de efectivos de la Policía Nacional, que monitorean los accesos bloqueados.
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