En pleno debate parlamentario irrumpió en la escena la figura de este ínclito parlamentario de Fuerza Popular (FP), Bienvenido Ramírez, con una sonrisa mezcla de inocencia y cinismo. Lo hizo para irrumpir, en plena sede de la soberanía nacional, con unas desgraciadas palabras que hasta Guido Lombardi, también parlamentario, que estaba al lado de él puso una cara de incredulidad a lo que estaba escuchando con su disertación. Dejó perplejos a propios y extraños. No daba crédito tremenda barbaridad de un personaje parlamentario siempre oportuno con una cantinflada que nos dejó a punto de darnos un telele. Indicó, en resumen sumario y bruto, que el Alzheimer estaba relacionado por las muchas lecturas que pueda hacer una persona a lo largo de su vida y que eso perjudicaba a la salud mental. Silencio. Que nos trague la tierra. Apaga y vámonos. Vergüenza ajena a esas las palabras que, seguramente, a muchos se nos pasó por la cabeza. Las intervenciones de Bienvenido, en amazónico Bienvenisho (se aceptan otras sugerencias sobre el mote amazónico), por lo general, causan polémica y están relacionados con la educación. También dijo unas desafortunadas palabras por el informe PISA. Bienvenisho es un cruzado del nuevo orden, un alpinchista de tomo y lomo. Aunque estas últimas palabras sobre la lectura y el desgraciado mal del Alzheimer, me parecen que van más allá de su literalidad. Un paréntesis, más bien estudios médicos señalan y recomiendan leer porque ponen en actividad al cerebro y así combatir el Alzheimer. Me parece que al parlamentario le ha traicionado el inconsciente. No lo ató lo suficiente en su intervención y se ha desmadrado. Lo que quería mostrar, muy en el fondo, es su denuesto a la lectura. Viniendo de un representante de la soberanía nacional habrá que andar con cuidado. Hay que recomendarle que pierda miedo y lea.
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